Como todos los meses de agosto..., llegan las fiestas mayores a los municipios de Aragón

Es el momento más esperado del año para muchos: se acerca agosto y eso significa que comienza la temporada fuerte de fiestas patronales en los pueblos de Aragón. Como dice Ixo Rai, "nos pondremos la muda bien limpia y del brazo saldremos los dos", porque son unos días para estar en la calle, reencontrarse con vecinos y amigos, desconectar de las obligaciones de la ciudad y disfrutar del ambiente festivo en cientos de pueblos de la Comunidad.

Este mismo fin de semana, a las puertas del inicio del mes, están de celebración en localidades como Utebo o Villanueva de Gállego, en Zaragoza; Orrios, en Teruel; o Perarrúa en Huesca. La próxima semana lo estarán en Perales de Alfambra y Noguera de Albarracín, en Teruel; Sallent de Gállego y Roda de Isábena, en Huesca o Navardún, en Zaragoza.

Para empresas como DFM Producciones, en esta época se concentra la mayor parte del trabajo de todo el año. Son los encargados de proporcionar el material y los medios para el disfrute de todos. "Nuestro trabajo es que la gente se divierta", asegura Rubén Arnal, gerente de la compañía. 

La esencia de estos días no cambia, aunque sí que evoluciona el programa festivo, asegura Bernal. "Las orquestas se siguen demandando pero cada vez menos. Se piden más espectáculos, tributos o artistas, macro discomóviles o macro DJs, con animadores, bailarinas e incluso acróbatas. Se busca buena calidad musical y del 'show'", subraya.

Hinchables, talleres infantiles, orquestas, discomóviles, vaquillas, comidas populares... Todo tiene que estar listo para el día del chupinazo (o pregón, dependiendo del pueblo), que marca el inicio de los mejores días del verano. "Se programa mucho para el público infantil. Ahora estamos entrando en los discomóviles infantiles por la tarde con animación, cada vez hacemos más. Antes se buscaba más algo tipo 'Cantajuegos', ahora se demanda un repertorio más actual, más comercial, lo que les gusta a los niños. Tenemos un pasacalles temático de los Minions que está triunfando mucho", indica Bernal. 

Atrás han quedado los veranos en los que la pandemia impidió o modificó sustancialmente estas celebraciones. "El sector se vino abajo en un momento, pero igual de rápido hemos sentido el apoyo a la vuelta. En cuanto se pudo, el teléfono ardía, había ganas de volver a la vida", celebra Bernal. En 2022, en muchas localidades se apuró el tiempo para contratar, por si había restricciones de última hora. "Este año todos lo hacen muy pronto, porque el año pasado se apuró y en muchos sitios se quedaron sin orquesta o sin algo en concreto. Aunque ha habido mucha previsión, hay una gran falta de producto", señala el gerente de DFM producciones. 

El mejor mes del año

"Siempre hemos dicho que agosto es el mejor mes del año y no es para menos, empiezan las fiestas de los pueblos donde te juntas con tus amigos y tu familia", asegura Oihane Lacosta, miembro de la Comisión de fiestas de Lobera d'Onsella (Zaragoza). Son días en los que los municipios se transforman. "Unos días antes el pueblo se empieza a llenar de gente, de reencuentros y de un ambiente muy especial. Hay mucha alegría por las calles. Es la semana perfecta para realizar actividades todos juntos y poder disfrutar del pueblo en un entorno festivo", asevera Lacosta.

Los encargados de organizar los festejos varían en cada pueblo. Las fiestas de Calamocha tienen la suerte de tener dos programas de actos, el que organiza el Ayuntamiento y el que prepara la asociación cultural y recreativa Peña la Unión, que ha planificado más de 50 actos durante tres días. "Desde discomóviles y orquestas, cafés concierto, rutas charangueras, monólogos, magos, tardeos, tributos, conciertos, meriendas, cenas y recenas para los 900 socios, chupinazo propio con pregonero de la Unión... Empezamos a organizarlos desde septiembre del año anterior, las orquestas conviene cerrarlas antes de diciembre porque la demanda supera la oferta y no se puede dejar para última hora, ocurre parecido con las charangas y tributos", cuenta María Villalta, secretaria de Peña la Unión.