Cetina volverá a vibrar al son de la Contradanza con cinco nuevos contradanceros

Un diablo y ocho contradanceros. Ellos serán, en la noche de este viernes, los protagonistas de la tradicional Contradanza de Cetina, una de las manifestaciones culturales más antiguas de Aragón. Tras dos años de parón por la pandemia, el año pasado volvió a interpretarse esta danza. No se tiene constancia de su origen exacto, ya que los primeros escritos en los que figura hacen referencia a las fiestas de 1751, donde se denominaba mojiganga. 

Durante este baile se interpretan un total de 32 mudanzas, que son cuadros plásticos donde se representan escenas relacionadas con Cetina, como la iglesia, el castillo o su virgen. "Es tan famosa porque tiene una magia especial. Verla en la plaza, al lado del castillo palaciego, con la luz de las hachas, es increíble", asegura Nines Maicas, concejala de Cultura de Cetina.  

Cartel Contradanza Cetina 2023 / Miguel Morón. 

Desde 2012, este baile está declarado Bien de Interés Cultural Inmaterial, lo que hace que numerosas personas se desplacen hasta la localidad de la comarca de la Comunidad de Calatayud para disfrutarla. "Cuando cae en fin de semana, cómo está vez, se desborda el pueblo porque genera mucha curiosidad. De hecho, el Ayuntamiento va a instalar una pantalla para que toda la gente pueda verla en la plaza y no se pierda nada", explica Nines. "Hemos viajado con la Contradanza por muchos sitios: el Teatro Principal de Madrid, Zaragoza, incluso al extranjero", afirma Miguel Morón, maestro del baile. 

Casi toda su vida dedicada a la Contradanza 

Morón es, desde hace seis años, uno de los dos maestros de la Contradanza en esta localidad. Empezó interpretando al personaje de diablo muy joven y ya ha perdido la cuenta de los años que realizó esta figura. "Estuve hasta después de casado. Este año además, por primera vez, salen dos de mis hijos, uno de ellos de 15 años", explica orgulloso. 

Los contradanceros entrenan solo dos días a la semana para preparar el gran día. "Este año está siendo complicado. Hay cinco contradanceros nuevos. Ensayamos todos los fines de semana desde Semana Santa porque ellos trabajan, estudian o, incluso, viven fuera. Además nada más comenzar los ensayos se quitaron dos jóvenes y por eso sale mi hijo pequeño. Creo que es el contradancero más joven que ha participado desde que tengo memoria, porque con 16 años sí ha habido alguno anteriormente", asegura.

Un gran esfuerzo físico 

La Contradanza dura alrededor de dos horas. Los jóvenes no paran de bailar en ningún momento, por lo que requiere un gran esfuerzo físico. "Hace falta agilidad, fuerza y resistencia. Es muy sacrificado, ya que los trajes dan calor y las caretas les hacen sudar", añade el maestro.

Este dance solo ha sido interpretado por hombres, aunque estarían abiertos a que participasen mujeres, sobre todo en las posiciones altas de las mudanzas. "Se sigue con la tradición antigua, pero el día 22 de mayo, que realizamos una romería a Santa Quiteria, son las mujeres las que bailan la Contradanza, interpretando alguna de sus mudanzas", apunta la concejala. 

Este baile tradicional es todo un orgullo para los habitantes de Cetina. "Se vive con nervios. Después, mientras se realiza, con emoción. Cuando termina nos impregna a todo el pueblo de un orgullo muy grande", recalca Nines Maicas, satisfecha.