Una victoria para despedir a Arturo Santamaría

El Fútbol Emotion Zaragoza recibe al Aspil Vidal Ribera Navarra este sábado a las 18.30 horas en el Siglo XXI en el cierre de la temporada y en el que será el último partido de la carrera profesional de Arturo Santamaría, guardameta que deja el fútbol sala al máximo nivel tras 20 temporadas en la élite, 16 de ellas en la entidad aragonesa. El cuadro blanquiazul quiere terminar el curso con buen sabor de boca ante su afición en la conclusión de la temporada y dedicarle el triunfo al meta.

El Fútbol Emotion, que regresa a su casa tras cuatro encuentros consecutivos fuera, defiende la undécima posición ante el Industrias Santa Coloma, que tiene 29 puntos, uno menos que los zaragozanos. Para el choque ante los navarros Santi Herrero no podrá contar con David Yera por lesión ni con Marcos Forga ni Alí, ya que se encuentran en Italia con la selección española sub-19 para la disputa del Torneo de las Naciones. Por su parte, el Aspil Vidal Ribera Navarra certificó con una goleada ante el Movistar Inter su presencia en el playoff de la Liga Nacional de Fútbol Sala, pero se juega un mejor cruce en las eliminatorias por el título y seguir mejorando sus sensaciones de cara a la Final Four de la Copa del Rey y el propio playoff.

Arturo Santamaría reconoce antes de su despedida que “esta semana está siendo un cúmulo de emociones”. Sintió “nervios antes de publicar la carta y mi decisión, que ha sido muy meditada” y, en su escrito, “quería agradecer a toda la gente que me ha aportado algo en mi vida personal y deportiva”. Después se ha mostrado “emocionado por las muestras de cariño que he recibido”. “Afronto mi última semana en la élite disfrutándola al máximo en los entrenamientos y el mismo día del partido. Tengo ganas de disfrutar por última vez de todo”, explica.

El portero cree que su último partido no va a ser duro, sino “todo lo contrario”, un choque “muy especial para mí”. “He cumplido el sueño que tenía desde niño de jugar en la élite y además en el club de mi corazón. Una vez empiece el partido va a ser normal y corriente y sí que ya cuando piten el final puede ser una explosión de emociones, pero no se qué se me puede pasar por la cabeza en ese momento”, afirma.