Pablo Insua comienza a ver la luz al final del túnel

Pablo Insua sigue dando pasos en su recuperación para poner fin a un calvario de casi cinco meses alejado de los terrenos de juego. El central se rompió el ligamento cruzado de la rodilla derecha durante un entrenamiento al final de la pasada temporada y tuvo que pasar por quirófano. Una lesión ya conocida para el jugador de 28 años, que en febrero de 2019 sufrió el mismo percance en la otra rodilla.

Entonces tardó diez meses en volver a jugar tras una larga y exhaustiva recuperación que se complicó con una lesión muscular. En esta ocasión, el futbolista gallego ha logrado acortar los plazos gracias a su duro trabajo y esta semana le hemos visto realizar su primer entrenamiento completo junto al resto del grupo en muchos meses. Insua, con contrato hasta 2023, comienza a ver la luz y  a trabajar en su regreso al centro de la zaga. El Huesca podría volver a contar con él en noviembre.