‘Post mortem’, un libro con imágenes de difuntos

Carlos Areces, coeditor del libro y coleccionista, comenzó esta curiosa afición por la disciplina de las fotografías post mortem hace 16 años. Todo empezó cuando vio una escena al respecto en la película de Alejandro Amenábar ‘Los Otros’. Así lo explica en La Cadiera, de Aragón Radio, donde comparte espacio con la autora, Virginia de la Cruz Lichet.

Ella es Doctora en Historia del Arte y considerada la mayor experta europea en esta fotografía. Ambos defienden el valor histórico, social y artístico que poseen estas imágenes que hoy en día, en nuestra cultura, resultan ciertamente “perturbadoras”. De la Cruz reflexiona sobre cómo ha cambiado la relación de la sociedad con la muerte en los últimos tiempos, “con el cambio de la sociedad rural que marcha a las ciudades y la consecuente pérdida de las tradiciones, y también debido a la revolución tecnológica”.

Defiende que esta técnica fotográfica nace durante la Época Victoriana, pero ya es heredada de la pintura. En cualquier caso, eran sociedades que querían rendir así homenaje a sus seres queridos perpetuando su recuerdo “muchas veces era la única fotografía que había de una persona. Hay que pensar en la época”.

Areces, por su parte, se confiesa un amante de todo lo antiguo “soy coleccionista de muchas cosas”. Con respecto a esta disciplina “me interesó porque es de la que menos se habla”. Explica en La Cadiera que estas fotografías “son muy cotizadas porque no son fáciles de encontrar, en cuanto pasan dos generaciones ya no reconoces al familiar y con la sensibilidad de hoy en día las que llegaban heredadas se deshacían de ellas”.

Otro elemento que demuestra que esta práctica estaba realmente extendida es que en la colección de Areces, que ahora se puede ver en el libro que publica Titilante ediciones, hay quince países distintos de origen de sus fotografías. “Se ha hecho en todas partes y se ha ocultado” concluye la autora.