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TRANVÍA

Zaragoza se convierte en la primera ciudad en probar tranvías con conducción autónoma

Esta previsto que esta pruebas se prolonguen hasta el año que viene. Con todo ello, se busca abandonar la dependencia de balizas y otros sistemas en la infraestructura del tranvía

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Prueba del tranvía sin conductor en las cocheras de Zaragoza.

Zaragoza es la primera ciudad del mundo que ha iniciado las pruebas piloto para la conducción autónoma de tranvías. Una práctica que permitirá a largo plazo, según sus impulsores, una mayor seguridad, conexión y sostenibilidad. Así lo ha señalado Eduardo Gálvez, director de gabinete la empresa fabricante de los tranvías CAF, en la presentación del primer convoy que prueba el nuevo sistema, celebrada en las cocheras del tranvía de Zaragoza. Gálvez ha ha apuntado que las pruebas empezaron a mediados de julio y está previsto que se alarguen hasta el año que viene.

Bajo el lema "Te veo, te percibo, te protejo" han presentado el primer convoy que servirá de prueba para la conducción autónoma en la capital aragonesa. El director ha explicado que este proyecto, al que han llamado Compass, busca posicionar el vehículo "de manera absolutamente precisa" mediante la recogida de todos los datos del entorno a través de sensores como tres radares ubicados en cada cabina (uno central y dos laterales), dos cámaras (una de largo alcance y un ojo de pez) y un Lidar, un dispositivo que permite determinar la distancia del tranvía a un objeto con tecnología láser.

Una vez recogidos estos datos en la fase de pruebas en la que se encuentra la unidad 3.010 del tranvía de Zaragoza, se elaborarán algoritmos que permitan el reconocimiento "inequívoco" de personas, vehículos, animales y señalización para mejorar la seguridad del transporte urbano, tal y como ha indicado Gálvez.

Este proyecto, que ya fue anunciado por el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, en la presentación en mayo del Congreso Europeo de Tranvías, está liderado por CAF y cuenta como principal fuente de financiación con las subvenciones del Europe's Rail, el máximo organismo europeo encargado del desarrollo de sistemas ferroviarios.

Con todo ello, se busca abandonar la dependencia de balizas y otros sistemas en la infraestructura del tranvía y sustituirlas por sistemas de posicionamiento obtenidos exclusivamente a partir de datos recabados por los propios vehículos.

Otro de los objetivos es ayudar al conductor en la toma de decisiones, puesto que contará con información ampliada sobre el estado del tráfico y los elementos que se va a encontrar en su trayecto.

En paralelo, el proyecto Compass se desarrollará también en Oslo (Noruega), país al que se le suministrarán tranvías fabricados en la factoría de Zaragoza y que cuenta con unas condiciones y estructuras urbanas muy diferentes a las de la capital aragonesa, lo que permitirá testar este sistema en situaciones muy distintas, según el director de CAF.

Gálvez también ha aclarado que una "conducción autónoma" no significa que no exista la intervención humana, sino que se incorporan mejoras para contribuir a crear una conducción "más eficiente", ha recalcado.

Por su parte, la consejera de Servicios Públicos y Movilidad del Ayuntamiento de Zaragoza, Natalia Chueca, ha asegurado que el "camino a andar es largo" y que "no van a verse mañana mismo" estos tranvías.

Además, ha explicado que Zaragoza es la "punta de lanza" en movilidad autónoma, porque es "la primera ciudad en el mundo" en contar con el traslado de mercancías mediante robots, así como con conducción autónoma en autobuses y tranvías.