130 personas participan en el Descenso Popular del Ebro

Tres años después de su última edición, el VII Descenso Popular del Ebro se ha celebrado de nuevo en Zaragoza. Este domingo, las más de 130 personas inscritas han recorrido diez kilómetros del tramo urbano del río en piragua, canoa, falúa o paddel surf. "Es un placer que tenemos que conservar los zaragozanos", ha afirmado uno de los participantes en la prueba, organizada por el club deportivo Monkayak.

El objetivo de este ejercicio no es ganar, sino disfrutar de una mañana en el agua. Por eso, el evento se ha convocado a las 11:00 horas en el puente de la A-2 para todas las edades y niveles. También se ha adaptado a personas con diversidad funcional. Adrián, quien hoy ha cambiado la silla de ruedas por una piragua, anima a todos a probar este deporte y destaca el valor de las vistas que ofrece la ruta: "Recomiendo que prueben el piragüismo en general, pero esta en concreto, porque da unas vistas del Ebro que son muy bonitas".

En concreto, 131 personas han recorrido aguas arriba el meandro de Ranillas, cruzando la mayoría de puentes de la ciudad: el del Tercer Milenio, el Pabellón Puente, el de la Almozara, el Puente de Santiago, el Puente de Piedra y el Puente de Hierro; hasta llegar al Puerto Fluvial de Vadorrey, donde ha concluido la jornada.

Por su parte, el Club Deportivo Monkayak Hiberus se ha mostrado agradecido de poder celebrar esta VII después del parón que la pandemia ha supuesto para todo este tipo de pruebas populares. "Estamos muy contentos de que la gente se anime por fin a participar en eventos así y que vea la ciudad desde otro punto de vista diferente, que es el agua", ha exclamado la presidenta, Selma Palacín.