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SANIDAD

Viruela del mono: transmisión, síntomas y diagnóstico

En España hay 36 casos confirmados, entre ellos un posible contagio en Aragón. Son el 41% de los casos registrados en todo el mundo

ARAGÓN NOTICIAS /
Una científica introduce líquido en una probeta. / Foto: Europa Press.
icono foto Una científica introduce líquido en una probeta. / Foto: Europa Press.

La viruela del simio humano (MPX) es una enfermedad viral zoonótica causada por el virus de la viruela del simio (MPXV). Se trata de una zoonosis endémica en África Central y Occidental donde circula en hospedadores desconocidos (probablemente roedores) y provoca brotes en primates y periódicamente casos en humanos, según indica el Grupo de Infecciones en Urgencias de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias.

La viruela símica se detectó por primera vez en los seres humanos en 1970 en la República Democrática del Congo (denominada en aquel entonces Zaire) en un niño de nueve años, en una región en la que la viruela se había erradicado en 1968. Desde entonces, la mayoría de los casos notificados proceden de regiones rurales de la selva tropical de la cuenca del Congo y el África occidental, en particular de la República Democrática del Congo, donde se considera endémica. En 1996-1997 se produjo un importante brote en ese país, explica la Organización Mundial de la Salud.

En la primavera de 2003 se confirmaron casos de viruela símica en EE.UU. Fue la primera vez que se detectó la enfermedad fuera del continente africano. La mayoría de los pacientes había tenido un contacto estrecho con perros de la pradera domésticos que habían sido infectados por roedores africanos importados al país. De los 47 casos ninguno fue por contagio entre personas.

Más recientemente, en 2018 y 2019, en el contexto de un gran brote en Nigeria, dos viajeros del Reino Unido, uno de Israel y uno de Singapur, todos con antecedentes de viaje en Nigeria fueron diagnosticados de viruela símica. Un trabajador de la salud del Reino Unido que atendía a uno de los casos se infectó de forma secundaria. Esta fue la primera vez que los viajeros se asociaron con la transmisión de la viruela del mono fuera de un entorno de brote.

¿Cuál es el periodo de incubación y cómo se transmite?

El periodo de incubación (intervalo entre la infección y la aparición de los síntomas) de la viruela símica suele ser de seis a 16 días, aunque puede variar entre cinco y 21 días.

Se transmite en contacto con animal, persona o material infectado a través de piel lesionada, membranas mucosas y tracto respiratorio

La viruela símica se transmite a los humanos a través del contacto con un animal o humano infectado, o con material contaminado con el virus. El virus entra al cuerpo a través de la piel lesionada, el tracto respiratorio o las membranas mucosas. Se supone que la transmisión del virus a través del contacto directo o indirecto con animales vivos o muertos es el factor principal de las infecciones humanas por viruela símica.

La transmisión de persona a persona es rara, pero se han informado eventos de transmisión en serie. De manera similar a la viruela, la transmisión de la viruela símica de persona a persona ocurre principalmente a través de gotitas respiratorias grandes durante el contacto cara a cara directo y prolongado. Además, el MPXV puede transmitirse por contacto directo con fluidos corporales de una persona infectada o con objetos contaminados, como ropa de cama o ropa.

¿Cuál es su diagnóstico?

Al realizar el diagnóstico clínico se deberán tener en cuenta los elementos que la diferencian de otras enfermedades exantemáticas como la viruela, la varicela, el sarampión, las infecciones bacterianas de la piel, la sarna, la sífilis y las alergias medicamentosas. La linfadenopatía que aparece en la fase prodrómica de la enfermedad puede ser una manifestación clínica que ayude a diferenciar esta enfermedad de la viruela humana.

El diagnóstico definitivo de la viruela símica solo se puede establecer mediante pruebas de laboratorio. El virus se puede identificar mediante diferentes pruebas que tienen que realizarse en laboratorios especializados. En caso de sospecha hay que obtener una muestra adecuada y enviarla en condiciones seguras a un laboratorio que disponga de los medios apropiados.

Las muestras óptimas para el diagnóstico son las procedentes de las lesiones: frotis del exudado de las lesiones vesiculares o de las costras guardados en un tubo de ensayo seco, estéril, sin medio de transporte para virus y en frío

Principales signos y síntomas 

La infección puede dividirse en dos periodos:

  • El periodo de invasión (entre los días 0 y 5), caracterizado por fiebre, cefalea intensa, linfadenopatía (inflamación de los ganglios linfáticos), dolor lumbar, mialgias (dolores musculares) y astenia intensa (falta de energía)
  • El periodo de erupción cutánea (entre 1 y 3 días después del inicio de la fiebre), cuando aparecen las distintas fases del exantema, que por lo general afecta primero al rostro y luego se extiende al resto del cuerpo

El número de lesiones varía desde unas pocas hasta varios miles, y afectan a las mucosas de la boca (70% de los casos), los genitales (30%), la conjuntiva palpebral (20%) y la córnea (globo ocular).

Algunos pacientes presentan linfadenopatía (inflamación de los ganglios linfáticos) grave antes de la aparición del exantema. Ese signo característico de la viruela símica permite diferenciarla de otras enfermedades similares.

¿Qué pronóstico tiene?

Para la mayoría de las personas es una enfermedad autolimitada, que generalmente dura de dos a cuatro semanas y da como resultado una recuperación completa. No obstante, las personas inmunodeprimidas pueden sufrir complicaciones como dificultad respiratoria, infecciones bacterianas secundarias y encefalitis.

Los pacientes deben aislarse mediante el uso de mascarilla quirúrgica y permanecer en una habitación individual. Se cubrirá cualquier lesión en superficie corporal. El paciente es contagioso hasta que todas las costras han caído.

Tratamiento, vacuna y letalidad

No hay tratamientos ni vacunas específicas contra la infección por el virus de la viruela símica, aunque se pueden controlar los brotes. En el pasado, la vacuna antivariólica demostró una eficacia del 85% para prevenir la viruela símica. Sin embargo, la vacuna ya no está accesible al público, puesto que se suspendió su producción tras la erradicación mundial de la viruela. Con todo, la vacunación antivariólica previa puede contribuir a que la evolución de la enfermedad sea más leve.

La tasa de letalidad ha variado mucho en las distintas epidemias, pero ha sido inferior al 10% en los eventos documentados. La mayoría de las defunciones se producen en los niños pequeños y, en general, los grupos de edad más jóvenes parecen ser más susceptibles a la viruela símica

La trasmisión entre humanos es escasa y requiere de un contacto estrecho, por lo que no se espera un número muy elevado de pacientes.