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SOCIEDAD

Cerca de 1.500 estudiantes aragoneses de Secundaria han apostado dinero a través de internet en alguna ocasión

Uno de cada diez de los menores que han realizado esta práctica podría llegar a convertirse en ludópata, según un estudio de Unicef

L. B. /
Las apuestas deportivas destacan entre las modalidades más aceptadas por los jóvenes. / Unsplash
icono foto Las apuestas deportivas destacan entre las modalidades más aceptadas por los jóvenes. / Unsplash

Divertirse y ganar dinero fácil son las dos principales razones que han llevado a alrededor de 1.500 estudiantes de ESO aragoneses a apostar dinero a través de internet en alguna ocasión, según el estudio 'Impacto de la tecnología en la adolescencia: relaciones, riesgos y oportunidades', publicado por Unicef. Como recoge este trabajo, la mayoría de estos alumnos, el 37,7%, alega el entretenimiento como motivo para realizar esta práctica, mientras que el 36,2% justifica esta conducta con los beneficios que pueden obtenerse. 

Los datos del Informe sobre Adicciones Comportamentales del Ministerio de Sanidad muestran que, a nivel nacional, en 2021, el 20,1% de los alumnos de 14 a 18 años reconocía haber jugado con dinero de manera 'online' y/o presencial. Por sexo, existían grandes diferencias: el 27,6% de los hombres afirmaba haberlo hecho, frente al 12,6% de las mujeres. La edad media de quienes apostaron a través de internet por primera vez era de 15 años, frente a los 14,6 de quienes lo hicieron de forma presencial. 

En cuanto a las modalidades de juego 'online' más aceptadas por los adolescentes, según el informe elaborado por la organización de las Naciones Unidas para la infancia, destacan las apuestas deportivas, con un 24,6%, seguidas del póker (15,9%), los rasca (10,1%), los tragaperras o ruletas (10,1%), el blackjack (10,1%) y el bingo (8,7%). 

"Las cifras estarían reflejando que, aproximadamente, uno de cada diez menores que juega o apuesta dinero 'online' puede llegar a convertirse en ludópata, lo que supondría estar hablando de cerca de 150 adolescentes", destaca el estudio de Unicef. 

Karina Tirado, responsable de la coordinación territorial de esta entidad, explica que, para elaborar estos datos, relativos al ejercicio 2021, realizaron una encuesta sobre el 3% de los estudiantes. "En total, en Aragón participaron 2.418 adolescentes", puntualiza. "El 96% de los menores tienen acceso a internet a través de un móvil, tablet... y esto supone estar expuestos a un mayor riesgo", apunta Tirado, quien señala al control de los progenitores como una de las respuestas a este problema. "La supervisión parental en Aragón es baja. Recomendamos a las familias que se preparen para la llegada del móvil y que generen un diálogo abierto para evitar este tipo de peligros", añade.

A pesar de que la normativa prohíbe a los menores de edad realizar apuestas, Mónica Saldaña, trabajadora social de la Asociación Aragonesa de Jugadores de Azar en Rehabilitación (Azajer), indica que algunos de los subterfugios que utilizan los adolescentes son usar el documento de identidad de otra persona o una tarjeta prepago no nominativa. "Al principio lo hacen con amigos para ganar dinero fácil. Siempre 'conocen' a alguien que lo ha conseguido", comenta Saldaña. Sobre la posibilidad de que quienes lo prueban acaben desarrollando una adicción, la experta señala: "Depende de la persona. Tenemos jóvenes que nada más empezar desarrollan la ludopatía. Es una forma de ocultar los problemas que no saben gestionar: un mal divorcio de los padres, pautas familiares estrictas o demasiado laxas, falta de comunicación real...".

El mejor arma: la comunicación

La trabajadora social de Azajer recomienda a los progenitores estar pendientes de varios indicativos: cambios repentinos de humor, respuestas agresivas a la petición de desprenderse momentáneamente del 'smartphone', o la falta de tiempo para finalizar las tareas que les han sido asignadas. "La mejor arma para lidiar con este problema es la comunicación, expresar emociones", ilustra.

Para ayudar tanto a los adolescentes como a sus progenitores, desde la asociación realizan charlas de prevención en centros educativos. "Los padres que vienen son los que menos lo necesitan. Estaría bien hacer algo de autocrítica y, sobre todo, que, cuando vean que algo pasa, no se pongan una venda en los ojos. Que pidan ayuda o consejo y que no relativicen", remarca.

Un problema también presencial

Entre los menores que juegan de manera presencial, predominan aquellos que lo hacen a la lotería convencional o loterías instantáneas y las quinielas, las apuestas deportivas y el bingo, concluye la Encuesta sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias en España (Estudes).

Por eso, Miriam Gañán, directora de Azajer, pone el foco en este tipo de apuestas. "Hay muchos menores que juegan a rascas, ya que no hay ningún control de acceso. Estos son superadictivos, porque producen una respuesta inmediata, que es lo que buscan quienes tienen esta conducta", subraya Gañán, quien pide una mayor vigilancia sobre estos productos.