Un centenar de confinados por un brote de COVID-19 en Ráfales (Teruel)

Más de un centenar de personas permanecen confinadas en la localidad turolense de Ráfales a causa de un brote de COVID-19, a la espera de conocer entre este viernes y el sábado los resultados de las PCR realizadas. De momento se han confirmado 17 positivos, pero quedan por conocer los resultados de la mayor parte de las pruebas.

Las alarmas saltaron el pasado martes, cuando una persona acudió al centro de salud de Ráfales con síntomas de COVID-19. Tras dar positivo, elaboró una lista de 30 contactos estrechos, a partir de los cuales la lista fue ampliándose hasta más de un centenar de personas.

El miércoles se practicaron las pruebas pertinentes en el pabellón municipal con un equipo médico desplazado a Ráfales, quedando todos ellos confinados a la espera de los resultados.

El municipio, cuyo censo habitual es de unos 150 habitantes, multiplica tres veces su población en verano por la llegada de familias oriundas que pasan allí sus vacaciones. Antes de este brote, Ráfales solo había registrado 23 casos de coronavirus en toda la pandemia.

A la espera de resultados de la prueba PCR

La mayoría de los positivos detectados en este gran brote salieron a la luz en los tests de antígenos practicados el miércoles. A aquellos que dieron negativo se les hizo una PCR de confirmación. "El jueves por la tarde llegaron los primeros resultados, entre los cuales solo hay un positivo", ha confirmado el alcalde de la localidad, José Ramón Arrufat.

Falta todavía por conocer los resultados de la mayoría de las PCR practicados, por lo que se mantiene el confinamiento para el centenar de personas que se han sometido a las pruebas. No obstante, tras los datos conocidos el pasado miércoles, en la localidad confían en que "los casos positivos sean mínimos", ha afirmado Arrufat.

El origen del brote podría estar en reuniones de jóvenes

El origen del brote se desconoce, pero el alcalde ha apuntado a "botellones y reuniones de jóvenes que se juntan en parques y zonas verdes, en aglomeraciones y sin mascarillas".

Ráfales no iba celebrar este año sus fiestas patronales, como ya sucedió el año pasado, pero se han hecho algunos actos culturales a cargo de la asociación local, con el fin de "entretener un poco a la gente del pueblo, ya que no había festejos", ha comentado Arrufat.

El alcalde ha asegurado: "Sabemos que no fue en ninguno de esos actos, porque se mantuvo el límite de aforos, se guardaron las distancias, el uso de geles y todas las medidas de protección".

Cerrados la piscina y el bar del pueblo

Pese a ese convencimiento, se han anulado los actos que restaban de la programación prevista. Además, el ayuntamiento ha cerrado la piscina municipal "por indicación de Salud Pública, y el dueño del bar ha decidido cerrar también", ha explicado Arrufat.

Estos días se ha detectado algún caso de incumplimiento entre las personas que debían permanecer confinadas, por lo que desde el consistorio se ha dado aviso a la Guardia Civil. El alcalde ha recalcado que se trataba de "casos mínimos".

Con el fin de facilitar el confinamiento a todas las personas afectadas, "se ha ofrecido llevar la comida a las personas que lo necesiten", ha apuntado el regidor, añadiendo que este servicio se ha prestado "también a otras personas que, por prudencia, no querían salir a la calle en esta situación".

Además, el Ayuntamiento de Ráfales puso a disposición de los vecinos los servicios de la alguacil municipal, que se ha ocupado de "ir a la farmacia o a por butano, bajar la basura, y lo que ha hecho falta", ha especificado el alcalde.