Reabre el Monasterio de Sijena con el atractivo de ver por primera vez su sala capitular

El Monasterio de Sijena reabre sus puertas a partir de este viernes. El principal atractivo será el poder acceder por primera vez a su sala capitular, un espacio que un día estuvo decorado por unas pinturas murales de época románica que actualmente se encuentran en el museo Nacional de Arte de Cataluña y son motivo de disputa legal entre Aragón y Cataluña. 

Está previsto que la capilla de la Inmaculada se una a las zonas visitables del Monasterio, después de finalizar su restauración con una inversión de 250.000 euros. También será posible recorrer los antiguos dormitorios, donde se exponen las 95 piezas recuperadas de Cataluña, y la mencionada sala capitular, lugar habilitado para albergar las pinturas murales cuando la Justicia así lo dictamine.

El Gobierno de Aragón y la entidad propietaria del Monasterio de Sijena, la Orden de Malta, han rubricado ya el convenio de colaboración entre ambas instituciones, que permitirá continuar con la exhibición de las piezas recuperadas de Cataluña en su lugar de origen. Esto supone que las visitas a la zona expositiva se retoman este viernes, 12 de febrero.  

Visitas

El consejero aragonés de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci, ha visitado este jueves el monasterio oscense para conocer el estado de los trabajos de restauración. "Estamos hablando con la orden para ampliar ese régimen de visitas, que se pueda visitar lo máximo posible siempre y cuando sea compatible con el régimen de vida del monasterio", ha comentado. Las visitas, que comenzarán de nuevo este viernes, tendrán el aforo reducido a cuatro personas por sesión.

Por su parte, el presidente de la Orden de Malta, Ramón Álvarez, ha explicado ​​​​​​que están "a la espera de que llegue una nueva congregación y lo importante es que tenga vida monástica, después de 800 años sería una pena que quedase sin vida y para eso estamos los propietarios la orden de malta".

Es la sala capitular donde deberían estar la pinturas murales de Sijena pero actualmente se exhiben en el museo Nacional de Arte de Cataluña. El litigio por estas obras es uno de los tres que existen entre Aragón y Cataluña, junto a los 95 bienes recuperados y los de Lérida, que deberían entregarse al Museo Diocesano de Barbastro antes del 15 de febrero.