La otra vuelta al cole: profesores que se jubilan y que se estrenan

Pizarras y nuevas tecnologías. Experiencia y sueños por cumplir. De entre los alrededor de 16.000 profesores de Infantil, Primaria y Secundaria (5.400 interinos) que ejercen en Aragón, los hay para quienes la de mañana es una jornada más especial que para el resto. Algunos vivirán su último curso, pues se jubilan. Otros afrontarán el primero, al estrenarse en la profesión. Hemos hablado con las dos caras de esta otra vuelta al cole.

Florencio Gracia está a las puertas de concluir toda una vida ligada a la enseñanza. Tras 40 años en las aulas, este profesor de Matemáticas y Tecnología en el Colegio Santa Rosa de Zaragoza se jubilará este curso antes de abordar nuevos retos. Atrás quedarán un sinfín de anécdotas y recuerdos con los alumnos como principales protagonistas.

"Todos los buenos ratos me los han dado ellos, sobre todo cuando me paran por la calle. Tengo ganas de cerrar el ciclo, ahora siento que hay cosas más allá de la educación", asegura con emoción.

A sus 64 años, a Florencio le restan "50 días de trabajo" para que finalice su actual contrato de relevo. "He cumplido mi misión. Me ha encantado dar clases. Soy profesor de pizarra, pero he sido bastante innovador en mi método", confiesa este veterano docente.

Un proceso de innovación que ha terminado de impulsar la COVID-19. La pandemia ha obligado a los profesores a reinventarse y a adaptarse a un modelo para el que no todos estaban preparados. "Ha sido muy raro. Se ha hecho mucho esfuerzo humano, hemos suplido las clases con virtualidad... pero las clases tienen que ser presenciales. El modelo online no me gusta. Cuando el alumno sale a la pizarra, sabes si lo ha entendido de verdad", explica.

"Si la pandemia hubiese llegado hace 15 años, hubiera sido una catástrofe", reconoce, eso sí, Florencio, que reivindica "mejores leyes y que se escuche más a la comunidad educativa".

Graus: primera experiencia en las aulas

En una etapa radicalmente opuesta está Judith Lerín. Una joven nacida en la localidad oscense de Peñalba hace 27 años, que cambia este año el paisaje árido y seco de Los Monegros por el verdor y las vistas del Prepirineo después de conocer su destino para los próximos nueve meses: Graus. Allí, en el IES Baltasar Gracián, afrontará su primer curso escolar completo como profesora de Plástica y Dibujo en Secundaria, cuyos alumnos empiezan las clases el lunes 13.

"Lo afronto con optimismo, por el entorno, por el centro y por la gente. Es un sitio de casi 300 alumnos, muy familiar, con personal docente muy agradable y con mucha experiencia", relata la joven graduada en Bellas Artes, que será una de los seis profesores jóvenes que se incorporen al claustro en este nuevo curso.

Lerín compara esta experiencia con la que tuvo de abril a junio de 2020 en el IES Goya, el primer centro de Educación Secundaria en Aragón, en el que tuvo que acoplarse a una maquinaria que "ya funcionaba", con la que está viviendo este año, pudiendo formar parte desde el principio de la estrategia y planificación de todo el curso escolar. 

A su entender, están preparados para afrontar la presencialidad completa del alumnado. De hecho, desde el centro también apuestan porque las reuniones del profesorado también sean en este formato.