Rincones aragoneses donde las tradiciones de Todos los Santos resisten

Frente a la ola imparable del Halloween, sus trucos y sus tratos, y el desfile de 'calamares' y demás personajes surgidos de las plataformas digitales, todavía resisten algunos rincones en Aragón en los que volver a vivir este año de aparente salida de la pandemia las tradiciones más propias ligadas a Todos los Santos, que, en no pocos casos, ya conviven con las modas importadas. 

Y eso que este año dos de los bastiones de la noche de ánimas, Trasmoz y Radiquero, no organizan ningún acto para este puente. “Hace meses ya que decidimos dejar las celebraciones para 2022”, cuenta Pablo, de Radiquero.com. La idea que llevan es hacer algún pequeño acto únicamente para los vecinos del pueblo. “No estábamos preparados para cumplir con los requisitos exigidos para recibir a cientos de personas en la noche de ánimas”, explica. Pero ya anuncia que esperan volver con fuerza el  año que viene. 

Otras localidades de la Comunidad sí han organizado eventos públicos para vivir un puente de miedo. Es el caso de Villanúa y su nueit d’almetas, organizada por El Capazo-Redolada, que no se verá frenada ni por la lluvia que se anuncia. 

“Esperamos que venga mucha gente, las visitas a la Cueva de las Güixas, por ejemplo, ya están completas hasta el lunes”, cuenta Andrea Dumall desde la Oficina de Turismo de la localidad jacetana. Una celebración que seguirá estirando la recuperación en el número de visitantes, que empezó en el verano. “La gente está muy animada a volver a salir, se ven muchas autocaravanas por el valle y estamos recuperando las visitas de escolares”, destaca.   

Así, este domingo 31, José Miguel Navarro dará una charla a las 16:30 horas en el Centro de Interpretación Subterránea sobre los usos que le daba a las plantas y las hierbas de la zona la bruja Guirandana de Lay, curandera de la que se cuenta fue quemada en la hoguera. A las 18:00 comienza un taller de disfraces y calabazas en el polideportivo municipal, y sobre las 21:30 horas, una vez que se ha cancelado la ronda con los Diaplerons d’o Lugar por la lluvia, se celebrará también el pabellón el concierto previsto de electro-folk de Idoipe, que presenta “Cierzo lento”, su primer disco en solitario. 

Piedrafita de Jaca también tiene previsto celebrar varios actos este fin de semana largo, si el tiempo lo permite, como el del cuentacuentos y el desfile de disfraces de este domingo, que se celebrará a las 17:30 horas en la plaza del Refugio, la posterior visita teatralizada, y el paseo guiado de mitos y leyendas en el valle de Tena, que tiene lugar esta mañana.

En Murillo de Gállego preparan una chocolatada en la plaza y un pasacalles de disfraces y, en Biscarrués, pendientes del cielo, han programado un paseo del terror con farolillos y linternas desde la plaza del pueblo y el encendido de la hoguera. 

La localidad de Fonz se entregará al placer del cacao con una chocolatada acompañada de tortas, y celebrará un cuentacuentos en el espacio cultural L’Urmo. Estadilla asistirá a la función de Títeres de Cachiporra ‘‘La calle de los fantasmas’, de Teatro Arbolé (17:00 horas) y proyectará cine de terror en el salón Buñero. Osera de Ebro reunirá en la plaza a sus disfrazados, y dará rienda suelta al miedo y los sustos de muerte en el Pasaje del Terror, creación audaz de los vecinos en la antigua sede de la Cruz Roja. 

Y en Hoz de Barbastro, perteneciente al municipio de Hoz y Costean, están previsto también un paseo guiado sobre mitos y leyendas del valle de Tena, cuentacuentos y juegos, y una visita guiada. Actos organizados por la asociación cultural La Paloma, con la colaboración de la Comarca de Somontano, que se trasladarán al salón del Ayuntamiento en caso de que se cumplan las previsiones de lluvia, según avanza el alcalde, Juan José Millaruelo. 

“A través de un chico cuyo abuelo es de Hoz, nos viene un grupo de teatro en el que casi todos sus integrantes llegan de Pamplona. Hace tres años, ya representaron una obra de teatro para las fiestas de julio, y estuvo muy bien”, recuerda a su lado Olga Olivera.   

Las visitas a los camposantos para mostrar el respeto y el recuerdo hacia aquellos que dejaron este mundo conviven estos días con las ganas de fiesta de muchos, locos por caracterizarse como seres de ultratumba o espíritus atormentados y vivir un puente de miedo en unos días en los que, por un momento, siquiera de forma banal, dejamos de vivir de espaldas a la muerte.