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DEFUNCIONES

Menos fallecimientos en Aragón y una causa de muerte por encima de las demás: el sistema circulatorio

En la Comunidad se produjeron, a lo largo de 2021, 14.516 defunciones, un 13,1% menos que en 2020. El pasado año, 114 personas se quitaron la vida

ARAGÓN NOTICIAS /
Las enfermedades del sistema circulatorio fueron la primera causa de muerte en la Comunidad en 2021.
icono foto Las enfermedades del sistema circulatorio fueron la primera causa de muerte en la Comunidad en 2021.

14.516 defunciones, un 13,1% menos que en el año 2020. Este es el saldo que la mortalidad dejó el año 2021 en Aragón, según los datos publicados recientemente por el Instituto Aragonés de Estadística (Iaest). Por sexos, el pasado ejercicio fallecieron 7.386 hombres y 7.130 mujeres, un 10,4% y un 15,8% menos, respectivamente, y 114 personas se quitaron la vida, un 11,8% más que el año anterior

Las enfermedades del sistema circulatorio fueron la primera causa de muerte en la Comunidad, con un 26,6% sobre el total de defunciones, seguida de los tumores (25,1%) y de la enfermedades infecciosas (11,2%), entre las que se contabilizan los fallecidos por COVID-19, tanto de virus identificado, casi el 10% del total de las muertes del año, como sospechoso. A pesar de tratarse de un dato inferior al del 2020, Aragón fue, en 2021, la segunda comunidad autónoma con más tasa bruta de fallecidos por coronavirus por cada 100.000 habitantes, detrás de Castilla y León.

El suicidio, un problema multifactorial que va en ascenso

Los datos de defunciones reflejan una realidad alarmante: más de 4.000 personas se suicidaron en España en 2021, una cifra un 1,6% mayor que la de 2020. De ellas, 114 (87 hombres y 27 mujeres) se quitaron la vida en Aragón, 12 más que el año anterior. 

Para el profesor de Economía Aplicada de la Universidad de Zaragoza y experto en despoblación, Luis Antonio Sáez, "las muertes externas, los suicidios, empiezan a ser un tema estudiado a nivel internacional". "El dato -indica- nos habla de hasta qué punto las generaciones nuevas, a veces por estilos de vida, condiciones, precariedad..., pueden presentar indicadores peores que sus predecesoras. Este incremento de los suicidios es lo que en Estados Unidos llaman 'muertes de desesperación'".

"Cuando empezábamos en el Teléfono de la Esperanza hablábamos de 10 fallecidos al día en España, ahora ya contabilizamos 11", explica Alberto Hernández, presidente de esta organización en Aragón. Para el experto, aunque se trata de un fenómeno multicausal: "Lo que sí que vemos es que los efectos psicológicos del COVID han hecho que los factores de riesgo que ya existían se hayan visto agravados". "Si durante la etapa de confinamiento, la pandemia fue un factor protector -argumenta Hernández-, posteriormente, empezaron a aparecer mayores tasas tanto de intentos y atenciones en urgencias como de actos consumados. La crisis del coronavirus, al ser global, ha influido de manera muy relevante para que quienes tenían factores de riesgo hayan encontrado en el suicidio una solución disfuncional a la situación que estaban vivenciando".

Sobre las diferencias por sexos, el experto señala: "Antes, la proporción era de tres hombres por cada mujer. Ahora ha aumentado, aunque las mujeres tienen más intentos. En cuanto a las causas detrás de este incremento, quizá esté que los hombres pueden tener más dificultad para expresar estados emocionales y pedir ayuda, o también factores culturales que les hagan retraerse".

Hernández también pone de manifiesto la necesidad de actuar sobre los jóvenes, durante la etapa educativa, como medida de prevención. "Se tendría que fomentar la inteligencia emocional, la resiliencia, con programas propios que faciliten que la población infantil disponga de más herramientas para afrontar las situaciones adversas", apunta.