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MODA

Mascarillas reconvertidas en bolsos o carcasas de móviles

La moda también se ha visto afectada por la pandemia, que ha traído consigo elementos antes impensables como fundas para geles hidroalcohólicos, entre otros

MAR BURGUEÑO /
Un bolso en formato mascarilla FP2, una de las tendencias que ha dejado la pandemia.
icono foto Un bolso en formato mascarilla FP2, una de las tendencias que ha dejado la pandemia.

Nadie estaba preparado para lo que estaba por venir. La pandemia causada por el coronavirus trastocó los planes de todo el planeta y trajo consigo restricciones, medidas sanitarias y nuevos elementos imprescindibles en nuestro día a día, como la mascarilla o el gel hidroalcohólico. La moda no se ha librado del fuerte impacto de la COVID-19 y ha encumbrado prendas como el chándal, las deportivas o el pijama, por delante del resto de tendencias que quedaron en un sigiloso segundo (o tercer) plano.

Pero no solo eso, sino que además, elementos higiénicos o sanitarios se han convertido en protagonistas o referentes en los que inspirarse para crear nuevas prendas. Es el caso de la mascarilla FFP2, que se ha convertido en un bolso de grandes dimensiones en el que las tiras de la mascarilla se convierten en las asas de la bolsa. Se puede encontrar en internet en dos colores, el blanco y negro, igual que la mascarilla, a bajo precio.  

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Este bolso está hecho en lona, cuenta con una gran capacidad de espacio y con todos los detalles para asemejarse a una mascarilla real. Este elemento un tanto extravagante se convirtió en un fenómeno de ventas, que además dejaba leer la frase 'Stop COVID-19' en su exterior. 

Las mascarillas han sido, sin lugar a dudas, las protagonistas de esta pandemia. Dejando solo a la vista la zona de los ojos y frente, las clásicas quirúrgicas de color azul pronto pasaron a ser reemplazadas por diferentes diseños, colores y texturas, e incluso dieron el salto a las alfombras rojas de diferentes eventos. Marcas emblemáticas del mundo de la moda como Louis Vuitton, Gucci o Balmain crearon sus propios diseños exclusivos que más tarde veríamos en las caras de actrices, cantantes y artistas. 

El fenómeno de las mascarillas también llegó a 'influencers' internacionales y nacionales, e incluso alguno de ellos lanzó su propia línea de mascarillas en diferentes colores y tamaños. Desde el imperio Inditex a las tiendas de moda más tradicionales se hicieron eco de la relevancia de contar con sus propios cubrebocas, que llegaron hasta los eventos sociales y familiares como bodas, bautizos y comuniones, donde los vestidos se combinaban con la mascarilla en color y tejido. 

Ahora, dos años después del inicio de la pandemia, se ha viralizado en Corea del Sur un nuevo formato de mascarilla, que tiene como peculiaridad que solo cubre la nariz, dejando al descubierto la boca. Las ha fabricado una marca surcoreana y esta nueva modalidad facilitaría comer y beber en bares y restaurantes sin necesidad de quitársela.  

Sin embargo, estas telas cubre nariz y bocas no han sido lo único que han dado un vuelco a la moda. También han surgido nuevos accesorios y complementos que se han convertido en imprescindibles del día a día. Un ejemplo son los geles hidroalcohólicos -no hay bolso que no contenga uno- y sus consiguientes fundas para portarlos, además de las carcasas de móviles con la forma de una mascarilla quirúrgica o las fundas para llevar los cubrebocas. 

Con forma de piña, de flamenco, de tortuga o de pelota de fútbol. Estas pequeñas fundas se utilizan para llevar el gel hidroalcohólico a todos lados, de la forma más sencilla -y bonita- posible. A esto, además, se le suma los diferentes olores, colores y formas diferentes que pueden llegar a tener los antisépticos, pasando del básico de farmacia a los que huelen a mandarina, melón o lavanda sin resecar las manos.