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CINCO MESES DESPUÉS

El turismo aragonés vive el primer desconfinamiento de forma dispar

A pesar de las previsiones, la afluencia ha sido menor de la esperada. Carreteras sin mucho tráfico y menos esquiadores de lo deseado en Astún

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Esquiadores en Astún

Es el primer fin de semana, en cinco meses, en el que los ciudadanos aragoneses pueden moverse libremente por toda la Comunidad. El Monasterio de Piedra --que ha reabierto este sábado--, los valles pirenaicos, la estación de esquí de Astún o localidades como Albarracín, conocidas por su turismo rural, son algunos de los  destinos más populares entre los aragoneses. Sin embargo, el hecho de que se mantenga el confinamiento autonómico impide que el turismo aragonés pueda notar la afluencia que muchos bares, restaurantes y hoteles necesitan para recuperarse económicamente del impacto de la pandemia.

Es el caso de la estación de esquí de Astún, que a pesar de ser la única instalación abierta para realizar deporte de nieve, no ha tenido la afluencia esperada. "Esperábamos un poco más de gente pero bueno, al fin y al cabo es un alivio para este final de temporada", ha reconocido el sub director general de la empresa EIVASA, Andrés Pita. 

En el Pirineo recibían ya desde este viernes a muchos visitantes de Zaragoza. Sobre todo, "mucha gente con segunda residencia", explica el presidente de la Asociación Turística del Valle del Aragón, Luis Terrén. Vienen, dice, "por las ganas de salir" y "porque, con las olas de frio que ha habido este invierno, la gente quiere darse vuelta" por sus propiedades. 

Otro de los destinos estrella de la provincia de Zaragoza, el Monasterio de Piedra, ha reabierto sus puertas de nuevo este sábado con la novedad de poder visitar el lago del Espejo de nuevo. La responsable de Comunicación del Monasterio de Piedra, Clara Gormedino, ha explicado que "está siendo un día muy cómodo con un aforo muy controlado, la gente está llegando muy espaciada en el tiempo y al final de la jornada esperamos que lleguen a visitar el monasterio de Piedra unas 500 personas".

Poco tráfico en las carreteras

La falta de tráfico en las carreteras durante este sábado es un indicador de la afluencia comedida de turistas en las tres provincias. A pesar de ello, sí se notó este viernes más movimiento  durante la tarde noche del viernes en algunas de las vías tradicionalmente más concurridas, como la A-23 para acceder al Pirineo por el puerto de Monrepós (Huesca).

 Aunque la ocupación turística se recupera solo levemente, son muchos los que aprovechan este fin de semana para visitar a familiares a los que llevan tiempo sin ver o para disfrutar de su segunda residencia, si bien la repercusión que estos movimientos tienen en los focos turísticos de la Comunidad es muy dispar.

Quienes no podrán esquiar este fin de semana, salvo que salten de valle, son Rosa y Luis. Después de cinco meses, han acudido a su segunda residencia de Tramacastilla de Tena, "con ganas de poder poder pasear y ver las montañas del valle". Pero después de todo un invierno sin poder desplazarse, tienen también "necesidad de ver la casa y comprobar su estado. Ha habido muchas heladas este invierno y algunos vecinos han tenido que subir porque les han avisado de reventones en tuberías".

Los hoteles del Pirineo siguen cerrados en su mayoría, por la vigencia del confinamiento autonómico, por el que no pueden recibir visitantes de otras comunidades. Distinta es la situación en cafeterías y bares, explica Terrén, en los que "sí que se nota" el desconfinamiento. De hecho, asegura, "muchos han sacado ya a trabajadores del ERTE para preparar estos días. En la zona tienen "ganas de volver a la normalidad y a la actividad habitual, y aunque aún queda mucho, con este tránsito de gente de Zaragoza, hay un pequeño hilo de actividad que permitirá salvar el fin de temporada". No obstante, el responsable de la asociación turística llama a la responsabilidad para que la gente se comporte y puedan "seguir abriendo". En el mismo sentido se ha manifestado el alcalde de Jaca, Juan Manuel Ramón, en un mensaje institucional, en el que recuerda que está en juego "el futuro y la recuperación económica de todo el año".

Teruel echa de menos el turismo valenciano

En la provincia de Teruel, mientras, el impacto del turismo previsto para este fin de semana es mucho menor de lo deseado, ya que su principal clientela viene de la Comunidad Valenciana y de Cataluña. El presidente de la asociación provincial Teruel Empresarios Turísticos,  Roche Murciano, señalaba este viernes que la ocupación en la capital turolense apenas llegaría al 5% basándose en las reservas de su propio establecimiento hotelero, donde solo ha recibido dos reservas desde Zaragoza. Añade que otros hoteles de centro, con más de un centenar de plazas, apenas han recibido cuatro reservas y otros, ni una. Con todo ello, muchos hoteles permanecen aún cerrados.

Murciano reconoce que en otras comarcas más próximas a Zaragoza como el Bajo Aragón, Matarraña o el Maestrazgo, la ocupación iba a ser mejor, pero al final "va a ser muy poca". Con todo ello, su principal esperanza es que los visitantes zaragozanos acudan a pasar el día a Teruel y consuman en la hostelería. Reconoce que "la gente de Zaragoza tiene mayoritariamente su segunda residencia en el Pirineo y estos primeros fines de semana acudirán allí". Además, alguno de los principales atractivos turísticos de la capital, como Dinópolis o el Museo de los Amantes, permanecen cerrados.

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