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INDUSTRIA

Los polígonos de las zonas rurales esperan el impulso del 5G

El Gobierno de Aragón pretende llevar la extensión de la banda ancha de altas prestaciones a todos los centros empresariales de la Comunidad

ARAGÓN NOTICIAS /
Rotonda de acceso al polígono industrial El Campillo, en la localidad zaragozana de Zuera.
icono foto Rotonda de acceso al polígono industrial El Campillo, en la localidad zaragozana de Zuera.

En poco tiempo, la falta de conexión a internet de última generación dejará de ser un impedimento para el desarrollo de los polígonos industriales ubicados en las zonas rurales de la Comunidad. La línea de 4,9 millones de euros en subvenciones anunciada recientemente por el Gobierno de Aragón con cargo al Plan de Recuperación, Trasformación y Resiliencia completará el primer plan autonómico de banda ancha de última generación que, según las previsiones del departamento que dirige Maru Díaz, está previsto que a finales de marzo alcance a 37 núcleos industriales (23 de ellos ya lo disfrutan). A ellos se unirán otros 41 pendientes de un programa de impulso estatal. 

Una nueva iniciativa muy demandada desde hace tiempo por las empresas y los alcaldes de las zonas rurales con la que se pretende dotar de una conexión de altas prestaciones a la totalidad de los centros empresariales de Aragón, listados por el Instituto Aragonés de Fomento, muchos de ellos de iniciativa pública.

"En este mundo tan digital, resulta fundamental disponer de las mejores comunicaciones y, por ello, nos parece muy necesario y muy bueno que los polígonos dispongan de banda ancha", apunta Luis Zubieta, alcalde de Zuera, cuyos espacios empresariales Los Huertos 1 y 2, Llanos de la Estación y El Campillo están incluidos en la reciente mejora. 

Polígono Llanos de la Estación, en Zuera. / IAF

El también presidente de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias (Famcp) confía en que el plan contribuya a "fortalecer" los municipios: "Instalar la banda ancha supone mejorar las condiciones para que se instalen nuevas empresas y eso será bueno para fijar población".  

En este proceso se dará prioridad a aquellos de más difícil cobertura. Según los datos que maneja el Departamento de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento, hay 62 polígonos que todavía no cuentan con un servicio de calidad.

De hecho, muchos regidores locales confían en que la inversión atraiga a nuevas empresas a sus localidades e impulse la venta de parcelas que en no pocos casos quedó condicionada primero por la fiebre constructiva y posteriormente se vio lastrada por la crisis económica. 

Sin ese problema de desproporción, pero con el ánimo de que su localidad se beneficie de la mejora, el alcalde de Alcampell (Huesca), Josep Antón Chauvell, se apunta al plan. "Desconozco la iniciativa, pero ya nos cuidaremos de averiguar cómo se pueden solicitar las ayudas. De momento únicamente tenemos un par de empresas, una de ellas con entre 25 y 30 trabajadores y esto vendría muy bien para la venta de parcelas y el desarrollo del polígono", valora.   

Fase II del polígono industrial de Las Hazas, en Cella.

"Hoy, sin una buena conexión a internet, las empresas no tienen nada que hacer porque han de conectarse a centros de trabajo que muchas veces están en el extranjero", reflexiona Juan Sánchez, alcalde de Cella (Teruel), quien tiene muy presente que esa conectividad resulta "imprescindible" en las zonas rurales para "equipararse" a las capitales, "aunque hay que reconocer que cada una funciona de manera diferente", considera.

Su localidad cuenta con los espacios industriales Las Hazas I y Las Hazas II, ambos beneficiados con la banda ancha. Allí, la empresa maderera Finsa, con unos 450 trabajadores, mantiene todos los servicios informáticos conectados a la matriz, ubicada en Santiago de Compostela, en Galicia. "Aquí se realizó bajo demanda la instalación de fibra óptica con Telefónica porque para nosotros es fundamental, y tenemos tanto los servicios de voz, de datos y de telefonía IP", explica un portavoz de la empresa, que sí ha observado como reciente mejora la preinstalación de fibra para cambiarles las pocas líneas analógicas que todavía manejan.

Una mejora "primordial y estratégica"

En Andorra (Teruel), donde tantos empeños se centran en pro de la reindustrialización, su alcalde, Antonio Amador, muestra su malestar por los problemas de cobertura, tanto de telefonía como de internet, que viene padeciendo su localidad desde hace un tiempo. "Necesitamos que las empresas de aquí puedan competir en igualdad de condiciones, es clave para el futuro de Andorra. Y no digo que nuestros polígonos (La Umbría y La Estación, incluidos en la última mejora de la DGA, y el Parque Empresarial de Andorra) deban tener la última tecnología, pero sí que estén adecuados al siglo XXI, es primordial y estratégico, por ello asumiremos las mejoras con recursos propios si es necesario", apunta. 

Allí todavía sufren problemas de conexión empresas como Gráficas e Impresión Bajo Aragón, ubicada en el polígono La Estación. “Atendemos pedidos de catálogos cuyos archivos pesan dos y tres gigabytes y muchas veces ocurre que llevas 40 minutos y, de repente, se produce una caída y tienes que volver a empezar”, explica Alberto Abellán, uno de sus empleados. 

Polígono La Umbría en Andorra. / Instituto Aragonés de Fomento.

“Trabajamos con servicios de entrega urgentes porque los clientes casi siempre tienen prisa y muchas veces tienes que subcontratar con otra empresa”, detalla. Ello les resta atractivo en el mercado gráfico. “Así somos tres veces menos competitivos que una empresa de Zaragoza. Y solo por el mero hecho de no tener una buena conexión”, lamenta. Una situación para la que no encuentra explicación. “Es una paradoja, porque tú en tu casa puedes ponerte tranquilamente el Netflix pero te desplazas a tu empresa y no tienes buena conexión para trabajar”. 

“Dentro del sector nos distinguimos por realizar entregas urgentes en 24-48 horas, lo que requiere un flujo de trabajo muy optimizado que obviamente pasa por disponer de un servicio básico como el de una buena conexión a internet”, apunta.   

 No muy lejos de allí, en el polígono La Umbría, Belén trabaja en Talleres Quílez, concesionario de Peugeot, una vinculación que les obliga a estar permanentemente conectados al servidor central. "Teníamos muchos problemas, incluso para enviar 'emails', porque aquí la fibra ni existía, y el verano pasado contratamos un servicio de internet por satélite con Alternatic y la velocidad es casi como la de la fibra", explica.