Los festivales vuelven a Aragón: música, turismo y empleo

España es el primer destino turístico de festivales del mundo. Se calcula que cada año se celebran alrededor de 1.000 festivales, cuyo impacto total alcanza 5.600 millones de euros, según el último estudio de la consultora Price Waterhouse Coopers. Cada asistente se puede llegar a gastar entre 300 y 500 euros.  Este tipo de eventos, además, generan más de 300.000 puestos de trabajo directos e indirectos.

Aragón no es ajena a este fenómeno y está ya preparada para la vuelta de los grandes eventos musicales. Además, en nuestra comunidad, conviven distintos tipos de festivales: con largo recorrido, como irineos Sur’; con vocación internacional como el Monegros Desert Festival o el Vive Latino; o de creación más reciente como el Mil Festival de Teruel. Detrás de todos ellos, mucha ilusión y esfuerzo.

 El 30 de julio llega el ‘Monegros Desert Festival’ dedicado a la música electrónica y a los sonidos urbanos.

Punto de encuentro desde hace tres décadas

Explicar un festival por la fiesta de presentación es casi hacerlo por el final. Pirineos Sur, uno de los más longevos del país, se prepara para recibir a unas 5.000 personas con cada gran concierto. Un importante reto en el que se lleva trabajando más de un año. "Ya está todo lanzado, previsto...Simplemente falta ejecutar. Están todos los planes descritos en el cronograma y ahora solo nos queda esperar la llegada de los artistas y hacer el montaje, es decir, materializar el festival", declara Roberto Recuero, director del festival.

La programación, el booking, la producción, la técnica o la administración, son algunos de los departamentos implicados, lo que se traduce en puestos de trabajo. Recuero admite que su plantilla se triplica, "ahora en el equipo fijo somos quince en la oficina durante todo el año y para el festival en sí contaremos con unas ochenta y cinco personas diarias sin contar el tema de hostería y camareros, eso sí".

Fundamental es el trabajo de comunicación, que ha dejado de ser algo estacional. Lorena Gonzalvo, codirectora de la agencia de comunicación Haiku Comunicación, corrobora la importancia de este sector: “Los festivales cada vez se anuncian antes, y hay que trabajar la información para que sean noticia constante. Esto se hace con los artistas a través de entrevistas en todos los medios, nacionales por supuesto, y buscar lo que llamamos 'perchas informativas', que son la excusa para vender este festival". Cobran también importancia las redes sociales y los actos concretos como las ruedas de prensa o las fiestas de presentación, que reportan toda una serie de ventajas. "Primero, porque traes a un artista representativo del cartel y que da mucho juego para entrevistas o el photocall. También esa foto que se consigue es mucho más atractiva y nos sirve para sacar entrevistas en los medios. También es importante el tema de las instituciones y partners ,que estén presentes y que sientan que son parte del evento”, apunta Gonzalvo.

El rapero Rayden es el anfitrión de Pirineos Sur, que tendrá lugar del 15 de julio al 6 de agosto. “Yo desde arriba siempre veo que los artistas unimos y que somos siempre la banda sonora, casi sin pedir permiso...Yo sólo puedo decirles a las personas que van a acudir que disfruten porque para nosotros es un lujo poder tocar en 'Pirineos Sur'", describe. Además, es la primera vez que acude a este certamen. “Es maravilloso poder estar en el auditorio de Lanuza. Yo no he estado nunca y, por compañeros de profesión, sé que es una gran experiencia", apunta Rayden. "Cuando veía fotos siempre pensaba que sería maravilloso poder estar allí y ahora ya puedo decir que mi sueño está cumplido", confiesa. Comparte escenario junto al músico puertorriqueño Residente. Y para esta primera experiencia reconoce haber recibido valiosos consejos: “Me han dicho que, aunque escuche cantos de sirena, que no me tire al agua, que está muy fría y que la energía del público es muy especial", señala el rapero.

Apuesta por la conservación del medioambiente

Los sonidos de la naturaleza se mezclan con las voces humanas en los alrededores de Mozota, en la provincia de Zaragoza. Los organizadores de El Bosque Sonoro huyen de todo protagonismo para centrar la atención en este proyecto rural de largo recorrido. "Con muchas acciones medioambientales a lo largo del tiempo, siendo sostenibles, intentando ofrecer al público una experiencia diferente a la de los macro festivales, que al final atacan a la cultura de base y a lo que nos dedicamos nosotros. En cambio ofrecemos festivales para mil personas como este porque lo que queremos es que la gente disfrute”, explica un organizador anónimo del festival.

Pero para que podamos disfrutar de la música se tiene que cuidar la parte técnica. La iluminación y el sonido se adaptan al espacio. “Dependiendo del tipo de escenario que es, de la altura, de la amplitud...son cosas que condicionan este montaje, pero también tienen mucho que ver las necesidades de cada uno de los grupos de música que vienen a tocar”, describe Jesús Estallo, responsable técnico de RAMPA.

El Bosque Sonoro se desarrolla en plena fauna de Mozota.

El encuentro de la música independiente

Trece ediciones avalan el festival Polifonik de Barbastro. Este año este encuentro de música independiente tiene un presupuesto de alrededor de 300.000 euros. Instituciones como el ayuntamiento de Barbastro, la comarca del Somontano, la diputación provincial de Huesca y el Gobierno de Aragón son fundamentales para su supervivencia. "Al final si tú vas a cualquier departamento de marketing y le hablas de nuestra población y cifras de asistencia, va a ser más difícil que te hagan caso que en Zaragoza. Como todo cuesta bastante las instituciones juegan un papel importante", comenta Iván Arana, director de este festival.

La Feria de Barbastro se prepara para acoger los días 1 y 2 de julio a unas 2.500 personas cada jornada. Áreas municipales como personal o cultura, entre otras, prestan apoyo al festival. Ana Escartín, técnico de cultura del ayuntamiento de Barbastro, confirman ese apoyo: "También hay colaboración por parte del ayuntamiento en áreas como urbanismo o servicios porque se colabora en aspectos más relacionados con la producción como escenarios, sillas, etc...Y también con la tramitación de los espacios donde se realizan los festivales”.

Un cartel internacional

También con vocación internacional se retoma en Zaragoza el 'Vive Latino'. Se celebrará el 2 y el 3 de septiembre y contará con 36 artistas en cuatro escenarios. Un ambicioso proyecto que echó a andar en 2019, pero que fue pospuesto y luego cancelado por la pandemia. “Vienen artistas de toda Latinoamérica y, poder sostener y cuadrar sus agendas durante estos tres años para que puedan venir aquí ha sido, sin duda, el mayor reto", admite Nacho Royo, director del evento.

Se espera que este certamen genere un impacto positivo. “Acuden asistentes de todo el mundo y, obviamente, el sector de la hostelería y de la restauración va a ser el que más se beneficie con la ocupación ya de los hoteles más cercanos. También la ciudad se va a ver beneficiada con toda la gente que la va a visitar como consecuencia del festival”, reitera Royo.

Leiva será uno de los artistas que actuará en el Vive Latino en septiembre.

Este verano en la provincia de Zaragoza se recupera festivales como el Lagata Reggae de Azuara, los días 25 y 26 de junio, el Amante de Borja entre el 5 y el 7 de agosto o el Slap Festival, en Zaragoza capital, el 9 de julio. Otro momento especialmente esperado es el 30 de julio con el Monegros Desert Festival dedicado a la música electrónica y a los sonidos urbanos. Una cita que atrae a asistentes de todo el mundo.