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RESERVA HÍDRICA

La sequía acecha: los embalses aragoneses apenas superan la mitad de su capacidad

Según la Confederación Hidrográfica del Ebro, los volúmenes almacenados son un 15% inferiores a los de la media de los últimos cinco años

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Embalse de la Tranquera. Europa Press.

La sequía y el calor están mermando las reservas de agua en la cuenca del Ebro. Ahora mismo los embalses se encuentran por debajo del 59% de su capacidad total, un 12% menos que el año pasado por estas fechas y una cifra por debajo de la media de los últimos cinco años, que se situaba en casi el 75%.

Un ejemplo es el embalse de Mediano que actualmente solo alcanza el 31% de su capacidad. De hecho, cuando baja del 35% la torre de Mediano que normalmente está sumergida bajo el agua queda totalmente descubierta. Una situación que suele darse a finales de septiembre o principios de octubre coincidiendo con el final de la campaña de riego, pero que este año se ha adelantado dos meses.

La jefa del área de Hidrología y Cauces de la Confederación Hidrográfica del Ebro, María Luisa Moreno, asegura que "estamos en volúmenes almacenados en torno a un 15%, en función de distintas áreas, inferior a lo que es un año promedio".

La margen izquierda, en alerta

Sin embargo, la situación es diferente en los dos lados de la cuenca. La margen izquierda se encuentra en alerta con un 20% de volumen menos que un año normal, como es el caso de Mediano o El Grado. El embalse de Yesa también ha sufrido este descenso, pasando de un 65 a un 50% este 2022. Al otro lado del Ebro, en la margen derecha, las reservas están por encima de la media, un 10% más

Según Moreno, no obstante, el abastecimiento de la población está garantizado, de la misma manera que las campañas agrícolas: "Han sido previstas con antelación en función del agua disponible, que ya se podía observar en los meses de abril y mayo, por lo que también están garantizadas con los consumos establecidos en cada una de las comunidades de usuarios".

La ola de calor ha aumentado la demanda de agua y todavía queda un verano seco por delante, por lo que, desde la Confederación Hidrográfica del Ebro se lleva a cabo un control del agua continuo

La peor situación de sequía se dio en 2005 cuando en Mediano apenas quedaron 40 hectómetros cúbicos de agua.

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