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ECONOMÍA

Los comercios aragoneses ven inevitable subir los precios si continúa la incertidumbre

Muchos establecimientos comienzan a notar un descenso en las ventas y tendrán que tomar medidas si prosigue el incremento de las materias primas, la subida de la luz y los problemas en el transporte

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Interior de la pastelería Ascaso en Zaragoza.

Son momentos de incertidumbre a nivel global y eso está pasando factura a muchos sectores, también a los comerciantes. A los problemas por la pandemia, se suman las fuertes subidas de la electricidad y los carburantes, el incremento generalizado de los precios, la huelga de los transportistas o la guerra en Ucrania.

Desde el mes de febrero, muchos autónomos y pequeñas empresas han notado una reducción en las ventas, y temen que les acabe llevando a subir los precios de sus productos. Así lo ha explicado en el programa Buenos Días Aragón, de Aragón TV, la directora de desarrollo de negocio de la Pastelería Ascaso, Sura Ascaso: "Todas las materias primas han subido en diferente proporción, a lo que se suma el coste de la energía, el transporte, con lo que se está convirtiendo en un momento muy difícil". 

De momento, este comercio no va a tocar los precios, pero si la situación no cambia se verán abocados a ello. "Vamos a ver qué pasa y vamos a aguantar un poco a costa de mucho esfuerzo, de reducir beneficios. Sabemos cómo está todo y vamos a intentar que al consumidor no le afecte demasiado, pero sinceramente creo que de aquí a poco va a haber que replantearse los precios. Va a depender de cómo evolucione la situación, que es bastante cambiante, hay mucha incertidumbre y las circunstancias nos dirán lo que podemos hacer, al fin y al cabo esto es una empresa", admite.

Sura Ascaso subraya que una manera de reducir costes es tratando de hacer unos embalajes más sencillos, aunque considera imprescindible que eso no afecte al producto: "Queremos cambiar el 'packaging', pero tiene que estar suficientemente bien como para que un producto tan delicado como el nuestro no sufra consecuencias. Lo fundamental es que la calidad de nuestro producto, lo que elaboramos, no se rebaje bajo ningún concepto, eso es sagrado", resalta. 

La profesional afirma que hasta Navidad y unas semanas después la afluencia de la clientela fue normal, pero ahora sí que se retrae un poco. "Influye la moral que tenemos, que estamos todos como un poco desanimados. Nosotros -añade- ahora tenemos que hacer un esfuerzo. Fíjate, ahora es época de utilizar mucho chocolate para las monas de Pascua, y van a tener el mismo precio del año pasado, pero después no sé si los vamos a poder mantener", concluye.