Lleno histórico en El Alcoraz para el derbi femenino

El fútbol aragonés ha vivido este sábado un acontecimiento histórico. No solo es la primera vez que se disputaba el derbi aragonés del fútbol femenino entre el SD Huesca y el Zaragoza CFF B en el estadio de El Alcoraz, sino que, además, se ha conseguido un récord de asistencia, con la totalidad de sus entradas vendidas. En total, algo más de 9.000 aficionados han acudido a esta cita tan esperada por azulgranas y blanquiazules, que ha terminado con la victoria de las oscenses por 1-0, y que se ha podido ver en Aragón TV. 

Ver un estadio como El Alcoraz a rebosar ha sido una experiencia nueva para las jugadoras que, en el caso de las oscenses, han pasado de disputar un primer partido con restricciones de aforos por la crisis sanitaria con apenas 700 aficionados a los más de 9.000 que se esperan hoy. "Hemos intentado que sea una fiesta más allá del fútbol. Tiene que servir como punta de lanza para fomentar el deporte femenino, crear referentes y que sirva para otros deportes", explica la directora del fútbol femenino de la SD Huesca, Azucena Garanto. 

A principios de la temporada, el SD Huesca lanzó la campaña 'Es hora de verlo', en la que se animaba a apoyar al fútbol femenino y, tras la buena aceptación de la afición, continuaron con 'Es hora de llenarlo', con el objetivo de abarrotar El Alcoraz en una cita histórica. "Es muy importante que podamos acercar el fútbol femenino a un público nuevo. Vamos a tener la oportunidad de mostrarlo a mucha gente que lo desconoce, para que pueda empezar a seguirlo y se enganche", señalaba Garanto. 

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Por otro lado, desde el Zaragoza CFF B han vivido este momento con "muchísimas ganas, nervios e ilusión", como señala la segunda capitana del equipo y la futbolista más veterana de la plantilla, Susana García. "Normalmente vienen a vernos jugar familiares y amigos, pero esta vez va a haber 9.000 personas en el campo que van a ver cómo jugamos, cómo luchamos... Es una tensión y unos nervios que nunca habíamos vivido. De hecho, con tanto nervio me da miedo no poder disfrutar de un momento que no sabemos cuándo volveremos a vivir, o siquiera, si lo volveremos a vivir", cuenta emocionada García.

"Para nosotras es un orgullo ser partícipes en un hecho histórico. Estamos que no nos lo creemos y creo que hasta que el árbitro no pite el minuto uno no vamos a ser conscientes. Tenemos una ilusión tremenda y también los entrenadores, porque saben lo que significa para nosotras jugar en un campo así", concluye la segunda capitana. Desde el club zaragozano no se han dispuesto autobuses para desplazar a la afición, pero sí se prevén trayectos por cuenta propia. 

El derbi femenino ha atraído a seguidores de las tres provincias de la Comunidad, que han lenado el campo azulgrana y también los bares y restaurantes de la capital oscense. "Desde principios de la semana hemos recibido muchísimas más llamadas para reservar para cenar este sábado", cuenta todavía sorprendido el propietario del bar Hifer, ubicado en los alrededores del estadio. "Solemos tener buena afluencia de clientes durante los días de partido, así que esperamos lo mismo del derbi femenino", cuentan desde el bar Bocatín. "La gente que va al campo a ver el fútbol suele venir más tarde a cenar, pero reservan en el último momento", señalan desde la cafetería Galileo. 

El fútbol femenino tiene mucho que decir y está comenzando a despuntar y a ganarse el interés de los aficionados de forma masiva. Un claro ejemplo se vivió en el Camp Nou, durante un partido entre el FC Barcelona y el Real Madrid femeninos, en el que el estadio recibió a 91.553 aficionados, logrando un récord mundial de asistencia. Sucedió el pasado 29 de marzo en Barcelona, cuando el histórico partido entre culés y merengues entró en los libros del fútbol tras superar a la final del Mundial femenino de 1999, que enfrentó a las selecciones de China y Estados Unidos y congregó a 90.195 espectadores. 

Ahora, una semana más tarde, se logra otro récord de asistencia histórico en Aragón en un partido de fútbol femenino, dejando claro que este hito constituirá un antes y un después en el deporte femenino en la Comunidad. "Al comienzo de la temporada no nos creíamos que pudiéramos llenar El Alcoraz. Las jugadoras tenían una sensación de incredulidad al pensar en ello, pero la gente ha entendido perfectamente el mensaje. No nos podemos llegar a imaginar el estadio, pero a mí me produce felicidad pensar que las niñas que vean el partido se van a poder fijar referentes en el campo, y ver que ellas también pueden conseguirlo", concluye la directora de SD Huesca femenino, Azucena Garanto.