Las vertiginosas pasarelas de Montfalcó estrenan imagen

Las conocidas pasarelas de Montfalcó, ubicadas en la comarca de La Ribagorza, han reabierto al público después de casi un año de cierre para someterlas a una reforma integral y aumentar su seguridad. El elemento más emblemático de esta ruta natural son los dos tramos de escaleras ancladas a las paredes de roca. Además, se han sustituido los carteles informativos y limpiado el sendero. El itinerario completo suma 16 kilómetros con un desnivel de 900 metros. 

El coste de las obras de este impresionante desfiladero, que separa Aragón de Cataluña, han ascendido a casi medio millón de euros, costeados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 

Una apertura muy esperada en la zona. En el albergue de Montfalcó explican que han notado bastante estos meses en los que las pasarelas han permanecido cerradas, ya que -con una afluencia de más de 150.000 personas al año- es uno de los principales activos de la comarca ribagorzana. 

Los trabajos se han centrado en el cambio de las antiguas pasarelas de madera por unas más robustas o la mejora de este puente colgante que une las comunidades de Aragón y Cataluña. "La obra ha sido una reforma integral total de la instalación, se ha cambiado todo. Han durado varios meses y hacía falta porque había sufrido mucho la estructura y era una actuación necesaria", ha explicado Gloria Burriel, guarda del albergue de Montfalcó. 

La mayoría de excursionistas que ya han podido recorrerlas valoran la seguridad de las renovadas estructuras que en la actualidad tienen los escalones más anchos y disponen de un mayor número de pasamanos. "Son mucho más seguras, antes era todo de madera, ahora es una estructura metálica y está más arregladita. Lo han dejado muy chulo", afirma una excursionista.

Una seguridad que se une a la espectacularidad que ofrecen sus vistas. "Es un paisaje impresionante y muy lindo", define otra visitante. Tan impactante como el bajo caudal que muestra el río Noguera Ribagorzana: "Me ha impactado mucho, la última vez llegaba casi hasta arriba y ahora me ha sorprendido lo bajo que está", lamenta otro turista.