Las tres unidades especializadas en heridas crónicas en Aragón

El pie de diabético, que supone la destrucción de los tejidos profundos del pie, ya se ha convertido en la primera causa de amputaciones en el país, por lo que detectar el problema a tiempo y llevar un tratamiento adecuado es fundamental. En Aragón existen tres unidades especializadas en heridas crónicas. Dos son recientes y están en el hospital de Barbastro y el Militar de Zaragoza. La más experimentada está en Huesca. Según datos registrados en diciembre de 2021 por el Gobierno de Aragón, en la comunidad 94.000 personas están diagnosticadas de diabetes.

Gema Serrano es una paciente que lleva más de un año intentando cerrar una herida en el Hospital Provincial de Huesca. "Después de una operación, se infectó y se quedó abierta. Entonces, ya he tenido varias intervenciones y no acaba de cerrar", cuenta.

Su evolución es lenta, pero favorable. Cada semana cuenta con la supervisión de profesionales que llevan trabajando 16 años en la Unidad de Heridas Crónicas del hospital oscense, la más antigua de Aragón.

"Muchas heridas crónicas que tenemos van asociadas a enfermedades degenerativas; de alguna manera, pacientes que están inmovilizados, pacientes que tienen un ictus", explica Marisol Ballabriga, enfermera.

Por otro lado, Carmen padece diabetes desde hace diez años, lo que le ha llevado a perder siete dedos de sus pies. Los altos niveles de azúcar en sangre han dañado los nervios y los vasos sanguíneos de sus extremidades. Ha perdido incluso sensibilidad en pies y manos, por eso, los expertos advierten que detectar el problema a tiempo es fundamental.

Según Susana García-Clau, enfermera de la unidad del pie diabético del Hospital de Barbastro, "la diabetes es la primera causa de amputación no traumática de las extremidades y es entre el 60 y el 80% de las amputaciones que hay a nivel nacional".