Las primeras horas sin peajes en la AP-2 transcurren con normalidad

Desde esta pasada medianoche, los vehículos que recorren la autopista AP-2, que une Zaragoza y El Vendrell (Tarragona), lo hacen sin pagar los peajes interpuestos entre los 215 kilómetros que unen la localidad zaragozana de Alfajarín con Tarragona.

Tras más de tres décadas de reivindicaciones, la primera jornada sin abonar los costes de los peajes transcurre, por el momento, con normalidad y se ha podido observar la circulación de diversos camiones y turismos atravesando los puestos de peaje sin necesidad de detenerse. Se espera que la liberación del recorrido descongestione el abundante tráfico diario que soporta la N-2, uno de los tramos que más accidentes registran en la Comunidad.

Los alcaldes de la zona coinciden en que el desdoblamiento era la mejor solución, pese a que los 11 municipios aragoneses que resultan afectados dejarán de ingresar 1,8 millones de euros. Una situación que se repite en Cataluña, donde se ha formado una plataforma de municipios afectados que ahora exigen al Estado que al menos les compensen con un 30% de lo que recibían por parte de la concesionaria. 

Clientela habitual

El hecho de que las primeras horas con las barreras arriba haya coincidido con el primer día del mes de septiembre distorsiona en parte el efecto sobre la circulación. Los habituales de la vía cuentan que por estas fechas el tráfico baja tras las diferentes operaciones de salida y retorno, y en los locales hosteleros y estaciones de servicio quedan los profesionales de la carretera. 

"De momento no se nota mucho, tenemos una clientela fija y las personas vienen a comer igual. Nos comentan que seguirán parando aquí, tanto si siguen por la Nacional o se desvían por la autovía", ha indicado Adrián Dolfes, responsable del restaurante 'El Único', ubicado en Osera, en la vía entre Zaragoza y Fraga.