Las grandes acumulaciones de nieve ponen en alerta al Pirineo ante posibles aludes

La nieve caída durante la semana presagia un buen fin de semana de esquí con casi 200 kilómetros de pistas balizadas. Pero su acumulación pone también en alerta al Pirineo oscense ante la posibilidad de que se produzcan aludes. Durante toda la jornada de este viernes, se están realizando voladuras controladas para evitar avalanchas sobre las carreteras. 

En algunas zonas de alta montaña hay espesores de hasta 50 cm, lo que sumado a que se trata de nieve fresca, crea un manto inestable, que puede deslizarse creando aludes, como explica el meteorólogo de Aragón TV David Fernández: "Ha caído una gran cantidad de nieve que no se ha compactado. Al no estar apelmazada, se puede deslizar fácilmente en las laderas de las montañas y producirse aludes de gran importancia, sobre todo en las comarcas de la Jacetania y del Alto Gállego".

En este sentido, el geólogo Iván González recuerda que el peligro de este fin de semana será "muy elevado": "Va a ser un fin de semana con temperaturas muy frías y las estructuras de hielo que se forman seguirán activas y puede haber accidentes".

Por otra parte, el geólogo advierte sobre la situación de la nieve, así como el viento cambiante, que, como resultado, deja acumulaciones de esta precipitación venteada "muy extensas" que hacen "complicada" la circulación en montaña.

Respetar la señalización y no esquiar fuera de pistas

Por eso, en el Pirineo se trabaja para evitar avalanchas. En la carretera N- 330 A, cortada por la intensa nevada, se ha activado el sistema antialudes desde Candanchú hasta Francia.

Una situación que se repite en Panticosa y en el paso fronterizo del Portalet, donde estaba previsto que en la mañana de este viernes sobrevolaran los helicópteros, pero las rachas de viento han impedido que despegaran.

Imagen de la N-330 este viernes. 

También las estaciones de esquí evalúan el riesgo. En Candanchú se reúnen los trabajadores cada mañana. "Lo que logramos es dar la tranquilidad y seguridad de que no va a haber ningún problema en la zona de pistas. Lo que aseguramos, sobre todo, son esas zonas, es decir, el dominio general que ha sido pisado y que está balizado", comenta Alvaro Luna, el director de la estación de esquí. 

Para los esquiadores, la recomendación más importante es respetar la señalización de las pistas y no dejar las zonas indicadas como seguras. "Te confías, te vas fuera y, realmente, es peligroso", señala un deportista, mientras otro apunta a que lo más seguro es mantenerse dentro de los límites: "Hay que esquiar con conciencia, por los sitios que están señalizados".