Lambán: "Ningún asesino puede quedar sin castigo"

El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha repasado los asuntos de actualidad en el programa de Aragón TV, 'Aquí y Ahora', en videoconferencia desde su casa, al estar confinado tras su positivo en coronavirus. Entre ellos, en el día en el que se cumplen diez años del fin de la violencia de ETA, ha querido acordarse, en primer lugar, de las víctimas. "Diez años después, lo primero que me viene a la cabeza es que debemos seguir homenajeando y recordando a las víctimas de ETA por encima de todo, y manifestando nuestra solidaridad con las familias", ha afirmado. "En su nombre, por razones de justicia, por su memoria, deberemos hacer esfuerzos ímprobos para que ni uno solo de los asesinos quede sin castigo. Hay todavía 300 asesinatos que no se han investigado, cuyos responsables no han sido llevados al banquillo, y la democracia española se ha de esforzar al máximo para que eso ocurra cuanto antes".

Javier Lambán, continuó con el recuerdo de que, el mes de octubre de 2011, supuso "el triunfo de la democracia sobre la barbarie antidemocrática". "Fue un éxito de toda la sociedad española, de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, de la política, de los ciudadanos, aunque, si me permite, siempre habrá que recordar a todos los gobiernos que participaron con el mismo énfasis y dedicación en el combate contra ETA, pero hay un hombre que merecerá siempre figurar en el frontispicio de las gratitudes y el reconocimiento, quien era ministro del Interior en ese momento, Alfredo Pérez Rubalcaba, que fue una pieza fundamental y definitiva".

Por último, Lambán aseguró que esta fecha debe servir para no olvidar. "No puede ser que, después de ser vencidos por la democracia española, los asesinos acaben ganado la batalla del relato y la sociedad vasca los asuma como un movimiento político de liberación ni nada por el estilo", ha afirmado. "Fueron una banda de asesinos que tenían que ir a la cárcel como así fueron. Es preocupante que, en este momento, haya amplios sectores de la sociedad vasca que, primero, no ha pedido perdón, y, segundo, celebra la salida de los presos en las calles de muchos pueblos del país vasco, recibiéndolos como si se tratara de héroes. Eso quiere decir que, todavía, el virus del nacionalismo violento, no ha sido erradicado del todo del país vasco, y eso es muy preocupante", ha concluido.