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EDUCACIÓN

La vuelta al cole no es solo para alumnos: profesores, monitores y familias cuentan cómo viven el día previo

Un total de 157.504 escolares aragoneses pertenecientes a Educación Infantil, Primaria y Secundaria comenzarán el curso este jueves, 8 de septiembre

M. BURGUEÑO / L. QUÍLEZ /
icono foto 157.504 escolares aragoneses comienzan el curso este jueves, 8 de septiembre. / Europa Press.

Los nervios del día anterior a la vuelta al cole no son solo cosa de niños. Profesores -los nuevos y también los que se jubilarán este año-, monitores de comedor, de ludoteca o extraescolares y familias se preparan para el comienzo del nuevo curso, que arrancará este jueves para 157.504 escolares aragoneses pertenecientes al segundo ciclo de Educación Infantil, Primaria y Secundaria.

La ilusión también toma protagonismo entre las emociones que desbordan a los profesores que este año, por primera vez, impartirán sus clases tras conseguir una plaza pública. "Este año es muy especial para mí, porque es el primero que empiezo como funcionaria de carrera. Así que, después de todo el trabajo y el tiempo invertido, me resulta muy emocionante comenzar este curso. Ojalá nunca me desaparezcan las mariposas del estómago el día antes de empezar, porque esta es una profesión maravillosa", explica sobre sus expectativas ante este nuevo inicio Ana Cabez, profesora de Inglés del CPI Rosales del Canal (Zaragoza).

Y, mientras unos empiezan su andadura, otros la terminarán este mismo año, con su última vuelta al cole definitiva. "Este es mi último curso. He trabajado ya 40 años y, aunque cada año es diferente, este tengo mucha más ilusión porque acaba mi carrera profesional, así que me quiero superar", cuenta sonriente la directora de la guardería infantil Monsalud, Paula Casas. Este centro, además, comenzará su transformación en escuela infantil, tras mucho trabajo y perseverancia, como indica su directora. "Soy optimista. Para mi es un logro personal y me siento muy satisfecha después de tantos años de trabajo", afirma Casas. 

Sin duda, si hay unos protagonistas de la vuelta al cole, esos son los niños. Los escolares de Infantil, Primaria y Secundaria preparan los últimos detalles para el arranque, mientras se debaten entre la ilusión y los nervios. "Quiero empezar el cole y ver a mis amigas porque las echo de menos. Además, ya sé que tutora me va a tocar, la misma del año pasado, que fue 'súper' maja", cuenta Ana Herráiz, una alumna que va a comenzar Segundo de Primaria este año. Por otro lado, los padres también han aprovechado los días previos al inicio para comprar materiales, revisar conceptos e incluso enseñar el camino al cole. "Hemos repasado los nombres de los compañeros de clase y hemos quedado el día de antes con algunos para que jueguen y se conozcan, y así el primer día será un poco menos traumático", explica Raquel Andía, madre de Julia Martínez, que comienza Primero de Infantil este curso.

"Voy a echar en falta el cariño de los alumnos"

Tras dos años de pandemia por COVID-19, de mascarillas en clases y patios y de distancia social entre profesores y alumnos, llega finalmente el curso de la normalidad. Un año que los profesionales esperan que sea el portazo definitivo a las restricciones sanitarias y la vuelta a las dinámicas y actividades de años anteriores. "Espero que este año, sin tantas restricciones COVID, todo resulte mejor. Espero que sea un curso más fácil, que nos relacionemos todos más y que los niños vuelvan a jugar. Los primeros días siempre son un poco más caos hasta que nos organizamos, pero seguro que este año va todo mucho mejor", explica María Jesús Pinilla, monitora de comedor del colegio Julián Bueno, ubicado en la capital aragonesa. 

Y es que la vuelta al cole va a ser dura incluso para aquellos que ya no van a volver a las aulas. Es el caso de Juan Bosco, profesor jubilado del IES Ramón y Cajal de Zaragoza, que no va a tener que ponerse el despertador para acudir a sus clases en este curso escolar. "Por primera vez en muchos años, prácticamente desde que era un niño, no voy a volver al cole en septiembre. Han sido muchos años y muy intensos de profesor, y voy a echar en falta muchas cosas. Aunque me jubilo de forma voluntaria, no quita que vaya a echar en falta el cariño de los alumnos, la certeza de que mi trabajo servía para alguien o para algo", agrega el docente zaragozano.