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FAMILIAS

La “jerarquía invertida” aumenta con la pandemia: los hijos tienen el poder

La relaciones intrafamiliares han cambiado a raíz de la nueva situación que ha llegado con la COVID-19, y los progenitores no siempre tienen las herramientas para establecer los límites

ARAGÓN NOTICIAS /
La pandemia ha generado cambios en las relaciones intrafamiliares. | EFE
icono foto La pandemia ha generado cambios en las relaciones intrafamiliares. | EFE

La situación “nueva normalidad” que ha traído aparejada la pandemia ha generado cambios en las familias, al provocar un mayor ascenso de la denominada “jerarquía invertida”, situación en la que los hijos tienen el poder, y los progenitores no siempre disponen de herramientas suficientes para establecer límites claros. También se constata que la etapa de la adolescencia es la que genera mayor conflicto en las familias.

Así se desprende del balance del servicio de intervención familiar del Gobierno de Aragón puesto en marcha para paliar el impacto de la COVID-19, y que en 2021 atendió a 52 familias a través de 416 sesiones. Entre las conclusiones, se señala que la pandemia ha visibilizado problemas que ya tenían las familias y que han emergido de forma más disfuncional. Añade que el confinamiento ha hecho que las personas contengan más sus emociones, y que se produzcan bloqueos emocionales.

Por otro lado, ha quedado patente que la coordinación intersectorial entre los servicios sanitarios, educativos y de servicios sociales ha resultado, una vez más, la vía más adecuada para la atención integral a las necesidades de las familias.

La directora general de Igualdad y Familias, Teresa Sevillano, explica que este servicio se creó con tres objetivos fundamentales. En primer lugar, asesorar a las familias en la gestión adecuada de las relaciones intrafamiliares generadoras de conflicto, como las dificultades de convivencia, o la violencia en el ámbito familiar. Pero también para atender situaciones de duelo por pérdidas significativas y ayudar a las familias a resolver las dificultades para incorporarse a las nuevas circunstancias motivadas por la pandemia. 



Cartel del servicio de intervención familiar para paliar el impacto COVID.

La Asociación Aragonesa de Terapia Familiar es la encargada de gestionar el servicio, tras la correspondiente contratación pública, con tres terapeutas especializados en familias y otros tres profesionales titulados con el Máster en Intervención familiar y sistémica de la Universidad de Zaragoza. Estos últimos, participan de forma voluntaria apoyando a los terapeutas en las necesidades que plantea el desempeño del servicio.

Perfil de las familias

 En total, este servicio ha llevado a cabo 416 sesiones con las 52 familias, que eran biparentales en el 74% de los casos, mientras que casi un 20% era monoparentales encabezadas por una mujer. Las edades de las personas adultas se concentraban entre los 40 y los 54 años, y la de los hijos entre los 12 y los 14 años. Además, el 80% de las familias llegaron derivadas de otros servicios como el educativo, el sanitario y los servicios sociales. El resto de las personas conoció el servicio a través de su entorno o de entidades sociales.

En la mayoría de los casos, pidieron ayuda para gestionar de forma adecuada las relaciones intrafamiliares generadoras de conflicto. En segundo lugar, se sitúan las familias afectadas por una difícil adaptación a la nueva normalidad y, en unos pocos casos, se atendieron situaciones de duelo, trastornos de la conducta alimentaria, violencia filio-parental y problemas de pareja.

Según explica Teresa Sevillano, el 82% de las familias que han sido atendidas considera que el servicio le ha ayudado a mejorar el problema consultado.