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ORTOGRAFÍA

La falta de tildes y las abreviaturas, los errores que indignarían a Fernando Lázaro Carreter

Las redes sociales y la mensajería instantánea han incrementado las dudas y las incorrecciones gramaticales. Aragón Noticias propone un cuestionario para refrescar algunas normas básicas

TERESA P. ALBERO /
icono foto Las redes sociales imitan el lenguaje oral, lo que dificulta una escritura correcta. / Canva

Dudar entre escribir 'a ver' y 'haber', olvidar las tildes, intercambiar letras que suenan igual o abreviar palabras son algunos de los errores ortográficos más comunes en la actualidad. Basta con echar un vistazo a las redes sociales o a los mensajes instantáneos para ver que la corrección escrita no vive precisamente su época dorada. 

Los lingüistas apuntan a la dificultad de algunas normas ortográficas como causa de algunos de esos errores, aunque también señalan a los despistes y a la carencia de conocimiento. Unas faltas de ortografía, como olvidar la 'h' en los participios, que indignarían al filólogo zaragozano Fernando Lázaro Carreter, que este jueves cumpliría cien años. Dedicó su vida al cuidado de la lengua y a la corrección, algo que ahora le costaría más de un mal rato si tuviera perfil en las redes sociales. 

Los lingüistas actuales mantienen vivo su legado y tratan de compartir su conocimiento con la sociedad. "Es importante adecuar la escritura al contexto. No es lo mismo un mensaje en Whatsapp, donde buscamos inmediatez y donde, normalmente, intentamos trasladar el lenguaje oral, que redactar un documento oficial", indica Andrea Ariño, doctora en Lingüística Hispánica y miembro del grupo de investigación Psylex de la Universidad de Zaragoza y del grupo de acción Icon. 

Abreviaturas, mayúsculas y tildes 

Cabe preguntarse si el problema de los descuidos en la escritura radica en la enseñanza. "Es verdad que en los colegios se enseña con dictados y con normas, pero no se explica de dónde vienen algunas grafías como la 'ñ', que nace en la Edad Media de lo que hasta entonces era la representación de 'nn'. Aun así, podrían realizarse ejercicios nemotécnicos que ayuden a fijar las normas, como dibujar un vaso de agua y relacionar su forma con la letra 'v'", propone la lingüista. 

Otro de los errores más repetidos hoy en día es el de abreviar las palabras. Es común leer en textos online 'q' en lugar de 'que' o 'tmb' para referirse a 'también'. Se trata de una práctica que nació con los SMS y que las redes sociales han devuelto al presente. "Es normal que se abreviasen las palabras para ahorrar dinero al enviar mensajes. Las abreviaturas no denigran la lengua, son parte de ella. Como todo, hay que saber cuándo usarlas y cuándo no", apunta Ariño.

Una idea en la que coincide la editora aragonesa de libros infantiles y juveniles Marta Álvarez, para quien no existe alarma en el uso de las abreviaciones: "Con los SMS se creó un alarmismo. Se denunciaba que las nuevas generaciones, como la mía, no sabríamos escribir bien sin recortar las palabras. Se ha demostrado que no es así. Es una fórmula que nace de las limitaciones de las redes -Twitter permite 280 caracteres y 4.000 para usuarios de pago- o de los mensajes en su momento".

El uso indiscriminado de las mayúsculas o su ausencia, incluso en nombres propios, está también a la orden del día. Al igual que ignorar los signos de interrogación y exclamación, que cada vez se ven más reducidos y se tiende a copiar su uso de idiomas como el inglés, donde solo se escriben al final de la frase. "Son calcos de otros idiomas que vemos en las redes, donde consumimos contenido en otros idiomas y tendemos a copiarlo", señala la editora aragonesa. Con todo, no ve esta tendencia como un problema: "Los jóvenes, la generación Z y millenial, sí que se salta mucho las comas en las redes, pero es parte del código de internet. A la hora de la verdad, en un texto formal, sí que escriben bien".

Como siempre es mejor probarlo que decirlo, desde Aragón Noticias proponemos un pequeño juego para recordar algunas reglas básicas de ortografía:

Las redes sociales son el problema, pero también la solución

Internet y las redes sociales parecen ser el enemigo de la corrección ortográfica, pero también pueden ser herramientas útiles. Lingüistas, filólogos y amantes de la lengua resuelven dudas en sus perfiles. Un ejemplo es el de la propia Real Academia de la Lengua Española (RAE), que en Twitter resuelve las preguntas de muchos usuarios, muchas veces con toques de humor. 

Con más de 75.000 seguidores, la cuenta de 'El conejito ortográfico' (@ortograconejito) es una de las más conocidas en este ámbito. Detrás de este perfil está la escritora e 'influencer' 'La Vecina Rubia'. En cada uno de sus tweets muestra, a través de frases relacionadas con la actualidad, cómo se escriben expresiones y palabras de uso cotidiano. 

No es la única. Un filólogo hispánico y corrector de textos anónimo se esconde detrás de 'La Letroteca' (@laletroteca), otro perfil activo que aboga por la divulgación de la lengua y que ayuda a disipar dudas ortográficas. 

Como siempre, la mejor ayuda para escribir es la práctica y la lectura.