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METEOROLOGÍA

La falta de nieve en las cumbres turolenses tiene en vilo a la hostelería y el turismo

Las estaciones de Javalambre y Valdelinares permanecen cerradas y sus 60 trabajadores se encuentran en ERTE

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Estación de esquí de Aramón-Valdelinares.

La atípicas temperaturas que está teniendo Aragón en este invierno están retrasando la llegada de la nieve. La estaciones de esquí turolenses de Javalambre y Valdelinares permanecen cerradas, lo que está repercutiendo negativamente en sector hostelero y turístico de la comarca, que centra la mayor parte de su facturación en la campaña de invierno.

El último día que nevó sobre Gúdar-Javalambre fue el 11 de diciembre. Desde entonces, la situación ha hecho que baje la contratación en los negocios y que las estaciones de esquí turolenses no puedan abrir; de hecho, sus 60 trabajadores se encuentren en ERTE.

"Está afectando gravemente a toda la comarca, sobre todo a los municipios más pequeños, como Alcalá o Valdelinares", señala Juan Carlos Escuder, presidente de los empresarios de Gúdar-Javalambre. Por suerte, algunas localidades han recibido visitantes, aunque no al nivel de otros años. "En Mora de Rubielos el mes de diciembre se ha comportado bien en cuanto a restauración, aunque en alojamientos ha habido menos gente. Si este invierno no hay esa apertura tan necesaria de las estaciones, la viabilidad de los negocios será, financieramente, muy dura", relata.

Para hacer frente a la nueva situación meteorológica, el presidente de los empresarios pide un cambio de mentalidad y apuesta por mantener las estaciones abiertas hasta Semana Santa, siempre que el tiempo de una tregua y regrese la ansiada nieve. 

Por su parte, Vega Llera, responsable del Hotel Selva Nevada, en Mora de Rubielos, reconoce que, actualmente, no tienen ninguna reserva, ni siquiera para el fin de semana, y que las pocas que había las han ido anulado. "Con las pistas abiertas a lo mejor sería entre semana un 25% de ocupación y el fin de semana un 100%", calcula. La temporada invernal avanza y, por el momento, sin planes de mejora a corto plazo: "La Navidad ha sido muy mala. Los gastos son prácticamente los mismos y no sé como vamos a aguantar. Lo estamos pasando todos muy mal, porque todos vivimos del turismo".

En otros puntos de la Comunidad, como Huesca, ya se hace un tiempo que vieron los primeros copos en las cimas más elevadas del Pirineo. El tiempo ha recuperado los valores normales para esta época del año. Astún, Canfranc o Candanchú han registrado desde el pasado domingo temperaturas por debajo de los cero grados, lo que ha permitido que se produzcan precipitaciones en forma de nieve, dejando espesores de hasta 30 centímetros. Una noticia que ha sido muy bien recibida por el sector hostelero y por las estaciones, que, pese a esta inusual situación, hacen un balance positivo de la campaña navideña, con la que han conseguido cifras de ocupación de hasta un 80%.