La colegiata de Santa María de Calatayud, lista para abrir sus puertas

La colegiata de Santa María de Calatayud ha reabierto este lunes sus puertas en un acto institucional tras doce años de clausura por obras. Será este fin de semana cuando lo haga al culto y a las visitas turísticas. Se trata de un templo declarado Patrimonio Mundial de la Unesco por las partes de la fábrica mudéjar que se conservan: el claustro, la torre y el ábside.

La colegiata tuvo que cerrarse en agosto de 2010, cuando cayó un trozo del arco toral que servía de embocadura a la capilla mayor. Tanto el Obispado de Tarazona, como el Ayuntamiento de Calatayud se pusieron en marcha para ver qué ocurría y fue cuando se descubrió que el templo tenía graves problemas estructurales. Entonces se decidió cerrarlo al público, y acometer las obras de rehabilitación. 

"Las principales obras que se han acometido no se ven a simple vista. Se han hecho trabajos de cimentación en las columnas que sujetan la cúpula, se han rehabilitado los tejados y en el interior se han restaurado los suelos, la sacristía y las puertas de algunas capillas", comenta Jesús Vicente Bueno, Abad de la colegiata.

Los trabajos han permitido recuperar la luz natural, con un sistema de lucernarios y reflectores, y el uso de materiales dentro de la tradición local como la piedra de La Puebla, de color rosado, y la de Calatorao, negra.

También se ha saneado el pavimento, se ha reforzado la estructura de la cúpula y se han reintegrado los tonos naturales de la decoración mural y escultórica, además de restaurar los elementos escultóricos de madera tallada, entre otras actuaciones. 

Las obras han tenido un presupuesto de más de 2,3 millones de euros en su segunda fase, que han financiado el Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento de Calatayud.

"Los vecinos están gozosos de que se pueda reabrir el templo. Hay gente mayor que decía que ya no volvería a verlo abierto, pero podrán verlo hoy", celebra Bueno.

El acto oficial de la reapertura de la colegiata de Santa María se va a celebrar este lunes, a las 11:30 horas. Y el próximo domingo, 15 de mayo, tendrá lugar una eucaristía en la que también participará el obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, que era obispo de Tarazona al inicio de las obras.