La CHE aplaude las nevadas y descarta una crecida preocupante en la cuenca del Ebro
María Luisa Moreno, jefa de Hidrología, afirma que las precipitaciones de nieve son mejores que hace un año, pero que es pronto para hablar de una campaña de riego asegurada
Baja con más caudal que en los últimos días, pero el Ebro solo ofrece una "crecida ordinaria, con niveles de agua habituales para esta época del año, de entre 500 y 1000 metros cúbicos por segundo". Así lo ha explicado María Luisa Moreno, jefa de Hidrología de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), que ha sido entrevistada en el programa Despierta Aragón, de Aragón Radio.
"Las precipitaciones de nieve son notables, con un promedio mejor que el del año pasado, con acumulados de entre 40 y 80 centímetros en el Pirineo", señala Moreno. "Esto ha hecho que se haya dado un salto cualitativo notable" y se hayan recuperado niveles propios de enero. También se han producido lluvias, menos cuantiosas que la nieve, que han permitido aliviar la mala situación de los embalses de la Comunidad, sobre todo "los de la margen izquierda". Moreno incide en que en Yesa "han entrado unos 20 hectómetros cúbicos" y en pantanos como el de Mequinenza que, según concreta, estaba en 500 y alcanzará los 1.000 hectómetros cúbicos para finales de mes.
Esa falta de precipitaciones de agua en cotas altas es lo que llena los embalses de Aragón de manera idónea. Se evita la "fusión súbita" de la nieve y las crecidas irregulares de los cauces. También ayuda estar en un "promedio de temperaturas típico" para el arranque del año. Según Moreno, " lo interesante es mantener esta estadística, con lluvias suaves que aumenten la humedad del suelo, para que se empape paulatinamente". En unos meses "será interesante ver cómo suben las temperaturas que beneficien al deshielo". "Lo ideal es que no se solapen con fuertes precipitaciones de agua en cotas altas", añade.
Desde la CHE no se apresuran a decir que la campaña de riego esté asegurada. "Nos encaminamos a niveles normales, pero todavía estamos por debajo de la media", matiza la jefa de Hidrología de la CHE. Una decisión que se tomará entre marzo y abril tras ver cómo han evolucionado hasta entonces las precipitaciones en Aragón.
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