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SALUD PÚBLICA

Intoxicaciones alimentarias: en Aragón se notificaron 120 casos en 2022

Dos personas se han visto afectadas por uno de estos brotes en la última semana en la Comunidad. El huevo crudo es uno de los alimentos con los que hay que tener más cuidado

ARAGÓN NOTICIAS /
30 personas han resultado intoxicadas por salmonella tras consumir tortilla de patata en el restaurante Casa Dani. / Pixabay
icono foto 30 personas han resultado intoxicadas por salmonella tras consumir tortilla de patata en el restaurante Casa Dani. / Pixabay

A lo largo del año 2022, en Aragón se notificaron 120 casos de toxiinfecciones alimentarias, una cifra inferior a la media de los cinco años anteriores. Según recoge el Boletín Epidemiológico de la Comunidad, en la última semana, dos personas se han visto afectadas por uno de estos brotes, de origen todavía desconocido, que se ha producido en un restaurante de Zaragoza. Entre los principales causantes de estas intoxicaciones se encuentran las bacterias salmonella, listeria, escherichia coli, campylobacteriosis, norovirus o rotavirus. Recientemente, 30 personas han resultado intoxicadas por salmonella tras consumir tortilla de patata en el restaurante madrileño Casa Dani. 

"La salmonella puede encontrarse en la cáscara de los huevos o aparecer si no se han conservado bien o no han sido manipulados a la temperatura adecuada", ha explicado la nutricionista Laura Reviejo en el programa Ahora y Aquí, de Aragón TV. Aunque la normativa establece que deben cocinarse a 70 grados durante un mínimo de dos o tres segundos, "en algunos casos, en las tortillas, si su interior está líquido, significa que el huevo puede no haber alcanzado la temperatura adecuada", indica.

Para evitar sustos, la experta recomienda realizar cuidados previos, manipular el huevo de forma correcta y extremar la precaución para evitar las contaminaciones cruzadas a la hora de conservarlos. "Deben mantenerse siempre en la nevera y no en la parte en la que se ponen las hueveras, porque ahí cambia mucho la temperatura. Tampoco hay que lavarlos antes, ya que su cáscara es porosa y se podría introducir la bacteria", señala Reviejo, quien apunta a la huevina -con los huevos ya pasteurizados y tratados térmicamente- como soluciones a este posible problema. 

Además, la nutricionista advierte sobre las consecuencias de una intoxicación por salmonella "sobre todo para las mujeres embarazadas". "En un restaurante que no sepa muy bien cómo trabaja no me tomaría una tortilla jugosa con huevo. Iría a una más hecha o a una que se haya cocinado con huevina", opina.

Derecho a reclamación

En el caso de haber sufrido una intoxicación, Alejandro Marín, delegado territorial de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) Aragón, explica: "Un usuario tiene derecho a reclamar los daños ocasionados por esa afección. Son bastante frecuentes y se reiteran año tras año". Sobre qué cubren estas reclamaciones, el especialista indica que, mínimo, "deben hacerse cargo de los días de baja que ocasione y el importe del servicio, los gastos de taxi o de medicamentos o, incluso, el precio de un viaje programado si este no se pudiera hacer". También incide en que es importante conservar los tickets del establecimiento al menos siete días, porque algunos de los síntomas pueden manifestarse hasta cinco días después de la ingesta. 

Cuando estos síntomas ya han aparecido, Marín remarca que es necesario que los pacientes aporten el informe y parte médico de las fechas en las que se produjo la intoxicación y que soliciten datos de la póliza de seguridad civil al establecimiento. En caso de no llegar a un acuerdo, "el cliente puede elevarlo a la vía judicial". Y recuerda: "Para menos de 2.500 euros no se necesita abogado y procurador. Que sean los jueces los que determinen esa responsabilidad".