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INGRESO INSERCIÓN

Incertidumbre ante la inminente sustitución del IAI por el IMV

A muchos beneficiarios se les ha negado el nuevo Ingreso Mínimo Vital y no saben si tendrán ingresos a partir de junio

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto La pandemia ha aumentado el número de personas en situación de necesidad.

El próximo 31de mayo desaparecerá el Ingreso Aragonés de Inserción. Lo cobran actualmente 5.870 personas. Será sustituido por el Ingreso Mínimo Vital puesto en marcha por el Gobierno central. Sin embargo, muchos actuales beneficiarios del ingreso aragonés se muestran preocupados, ya que se les ha denegado la nueva prestación. El Gobierno de Aragón está trabajando para poder dar una respuesta a estas personas y que no queden desamparadas, pero los afectados ven que el tiempo se acaba. 

En esta situación se encuentra Chema. Vivía en el extranjero y, desde que volvió a España hace un tiempo, no encuentra trabajo. Tiene 60 años y es parado de larga duración. Está cobrando el Ingreso Aragonés de Inserción, pero se la denegado el Ingreso mínimo vital. Chema se queja porque cuando le denegaron el ingreso, dice, "no te explican por qué". Y se pregunta qué ha cambiado para no poder cobrar el nuevo ingreso: "si yo tenía concedido el Ingreso Aragonés de Inserción, que son unos requisitos parecidos, resulta que el Ingreso Mínimo Vital no lo tengo. Y yo sigo siendo la misma persona con los mismos problemas".

Desde el Gobierno de Aragón aseguran que para casos como el de Chema, se va a crear una ayuda que actualmente se está debatiendo en las Cortes. Sin embargo, plataformas sociales como el Colectivo Dignidad recuerdan que la fecha límite ya está aquí y esa alternativa no ha llegado aún. Lucía Capilla, trabajadora social del colectivo, recuerda que hay multitud de casos diferentes: "denegaciones del IMV, personas que se quedan un limbo porque no pueden solicitar uno y no ha habido respuesta del otro, denegaciones de personas que lo han recibido con cuantías muy pequeñas, de apenas 90 euros al mes que no les van a sacar de su situación..."

Lucía Capilla denuncia que esta situación es una preocupación añadida a la situación de vulnerabilidad de estas personas: "son personas que están acostumbradas a sobrevivir con 490 euros que ahora, probablemente, se queden a ingresos cero y eso lo que genera es mucha más ansiedad, y muchos más problemas de salud mental".

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