Hoy es el Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas

El 23 de septiembre de 1913 se promulgó, en Argentina, la primera norma legal en el mundo contra la prostitución infantil. Por ello, tal día como hoy se conmemora el Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas.

La lucha contra la explotación cuenta con una doble vertiente. Por un lado, el trabajo policial, esencial para detectar las redes y organizaciones criminales que llevan a cabo estas actividades. Por otro lado, la labor diaria que realizan muchas entidades sin ánimo de lucro. Todas las instituciones implicadas se coordinan para dar respuesta a este problema.

Según el último informe sobre explotación sexual y trata de personas, publicado en 2020, ha habido 8 víctimas de trata sexual en Aragón en 2016, 3 en 2020. En cuanto a personas en situación de riesgo, en la Comunidad había 438 en 2016, 169 en 2018, 283 en 2019 y 175 en 2020.

Actualmente en Aragón hay varias investigaciones en curso. Mar Gil, inspectora de la Jefatura de Policía de Huesca e interlocutora policial contra la trata de seres humanos explica en Aragón Radio que “se está traficando con personas con la finalidad de explotarlas. A veces no solo para realizar explotación sexual o pornografía, sino también explotación laboral o matrimonios forzosos para cometer actividades delictivas”. También destaca el importante papel que lleva a cabo la figura del interlocutor social: “Tener una persona, un punto de contacto para llevar temas de trata ha permitido que, por ejemplo, en una provincia tan pequeña como Huesca se pudiera identificar, localizar y detener en 24 horas al proxeneta más buscado de toda España”.

El programa O’Cambalache de Cruz Blanca Huesca cuenta con siete unidades móviles repartidas por toda la Comunidad que les permiten acercarse a aquellos espacios donde las mujeres están siendo prostituidas. “Este año contactamos con más de 500 mujeres. En ese trabajo de acercamiento, no solamente trabajamos mediante consejo breve todo el tema preventivo, sino que también realizamos una observación activa de posibles indicios, para poder identificar víctimas de trata”, asegura su coordinadora, Pilar Paul.

Otro pilar sobre el que trabajan es el tema de mediación y acogida –disponen de una red de recursos para que las víctimas puedan reconocerse como tal– y sensibilización social. “Es muy importante que la sociedad no llegue a los discursos fáciles de ‘están porque quieren’, ‘es que les gusta’. No están porque quieren”, matiza Paul.

Aunque el tema de la trata está globalizado, ambas expertas coinciden en que la mayoría de casos que se están encontrando provienen de países latinoamericanos, Costa de Marfil y Nigeria en África y Bulgaria o Rumanía en Europa. Gil afirma que tienen que realizar un trabajo muy profundo para conseguir que lleguen a denunciar: “Hay que tener en cuenta que son mujeres que vienen con una experiencia muy traumática. Se les ha dejado solas en otro país, por lo que se favorece más ese control sobre la víctima. Han sido engañadas, tienen una situación muy vulnerable a nivel personal, a nivel económico y muchas veces proceden de países donde la policía, la justicia, la administración no tiene nada que ver con España. Ellas están convencidas de que si contactan con un policía las va a llevar a la cárcel”.

Pilar Paul coincide en que dar ese paso es “muy difícil”. Supondría para las personas que se encuentran en esta situación renunciar a tener ingresos económicos durante un largo tiempo, ya que, hasta que no tienen papeles no pueden optar a un contrato laboral.

La Policía Nacional dispone de un número de teléfono (900 105 090) y un correo electrónico (trata@policia.es) donde cualquier persona que detecte alguna víctima de trata pueda ponerse en contacto y denunciar. Ambas opciones son gratuitas, confidenciales y gestionadas directamente por agentes especializados