Hacerse pasar por otro o usar el móvil: fraudes detectados en Zaragoza para recuperar el permiso de conducir
Agentes pertenecientes al Grupo de Investigación y Análisis de la Guardia Civil de Aragón han llevado a cabo una inspección para verificar el normal desarrollo de las pruebas teóricas
Agentes pertenecientes al Grupo de Investigación y Análisis (GIAT) del Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Aragón, en colaboración con la Jefatura Provincial de Tráfico de Zaragoza, han llevado a cabo una inspección para verificar el normal desarrollo de las pruebas teóricas para la recuperación del permiso de conducir clase 'B', donde ha detectado a dos personas realizando dichas pruebas de manera fraudulenta.
La primera de ellas accedió al aula de exámenes acreditándose ante los funcionarios de la Jefatura Provincial de Tráfico con un permiso de residencia expedido a nombre de otra persona. Esta práctica no se detectó al principio, debido a la similitud en las características físicas de las personas implicadas, ambas de origen subsahariano, según han informado desde la Benemérita.
Una vez había comenzado el examen, los agentes de Guardia Civil comprobaron que el aspirante estaba suplantando la identidad de la persona a la que le correspondía realizar la prueba. Tras verificar que los implicados actuaban en connivencia, esta persona fue detenida por un presunto delito de falsedad y suplantación de identidad, siendo localizado y detenido también el otro implicado por los mismos hechos.
Cámara del móvil
Por otro lado, los agentes advirtieron que un varón de nacionalidad china, que infundió sospechas a los agentes de estar haciendo uso de medios técnicos fraudulentos para realizar el examen, portaba dos teléfonos móviles y hacía uso de la cámara de uno de ellos.
A través de un orificio en la prenda de vestir exterior que llevaba, se podía visualizar la prueba por otra persona, quien estaba en el exterior de las instalaciones y, mediante un pinganillo colocado en el oído del aspirante, le comunicaba las respuestas correctas.
Este hecho se puso en conocimiento del personal de la Jefatura de Tráfico de Zaragoza para que la prueba quedase invalidada y se iniciase el correspondiente expediente administrativo.
Esta conducta se encuentra tipificada en la vigente Ley de Seguridad Vial 18/2021, de 20 de diciembre, como infracción muy grave, en el artículo 77-U, e implica la imposibilidad de volver a presentarse a las pruebas por un plazo de seis meses y 500 euros de multa.
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