"Lo ocurrido en Afganistán es una hecatombe a nivel humano"

Desde la Base Aérea de Zaragoza han operado 15 vuelos hasta Kabul, con miembros del Ejército, que se han desfondado para traer a España a más de 2.200 afganos. Entre los 54 militares españoles que han colaborado en el operativo, se encuentran dos miembros del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo, que han hablado con Aragón Noticias. Lo más duro, dicen, ha sido no haberse podido traer a todo el mundo. 

El sargento primero de Primer Escuadrón de Apoyo Aéreo, Roberto Moya, explica que no se alistó por otro motivo que colaborar en este tipo de operaciones. "Es una hecatombe a nivel humano, las personas agolpándose contra las puertas sin importar quién hay debajo. Estaban días y noches en el canal, donde había aguas fecales", relata. 

Para el capitán de este escuadrón, Joaquín González Lázaro, "los primeros vuelos eran chocantes, porque se veía gente esperando a poder entrar, se veía mucha miseria, caras de satisfacción y liberación, y familias de cuatro y seis miembros con un macuto para toda la familia. Nos preguntaban y no sabían si estaban en España, en EE.UU... no sabían dónde estaban", indica.

González Lázaro apunta que, a pesar de que son entrenados para este tipo de procedimientos, cuando llega a casa y tiene dos días para pensar lo que ha vivido es cuando se da cuenta de la labor que han hecho y de las segundas oportunidades que han dado a otras personas.