Gripe, COVID y virus sincitial: ¿cómo diferenciarlos?

La sobrecarga de trabajo que estos días sufren los centros de salud y los hospitales de Aragón se debe, en gran parte, a la presencia de tres virus que conviven al mismo tiempo en la Comunidad: la gripe, la COVID-19 y el respiratorio sincitial. Esta situación provoca que más gente enferme y necesite atención médica. Diferenciar estos tres virus es una tarea compleja, según indican los propios profesionales sanitarios. Los tres virus tienen sintomatología similar: malestar general, fiebre, tos, etc.

"Los síntomas son muy parecidos en los tres casos, igual que sus tratamientos, por lo que no es tan relevante conocer si padecemos uno u otro virus", explica Belén Lomba, médico de Atención Primaria y secretaria del Colegio de Médicos de Zaragoza. Por eso, la única prueba capaz de diferenciar la gripe del COVID o del virus sincitial es el test de autodiagnóstico que se distribuye en farmacias, en el que se muestra qué clase de infección muestra el paciente.

La doctora Belén Lomba explica así la sintomatología específica de cada uno de estos virus:

• Virus sincitial: es el causante de la bronquiolitis, que afecta en mayor medida a la población infantil. Su principal característica es la disnea o dificultad respiratoria. "En este virus hay que poner medidas enseguida, porque la afectación es bastante grave en los niños", afirma Lomba.  

• Virus de la gripe: en el caso de la gripe A se manifiesta con un catarro en las vías altas, con malestar general corporal, fiebre alta, dolores musculares y bastante cefalea. Una de sus características principales es la fiebre, además del malestar muscular. 

• Virus de la COVID-19: gracias a las vacunas, la COVID ya no genera tantas complicaciones derivadas en neumonías como en otras épocas anteriores. Ahora, afecta como un catarro con fiebres altas y cefaleas, aunque dependiendo de la variante se darán unos síntomas u otros. En el caso de la variante Delta es común la pérdida de olfato y gusto, mientras que la Ómicron está más enfocada en cefaleas. 

Además de estos síntomas, es importante recalcar que a cada paciente le afecta de forma diferente cada uno de estos virus. En cuanto al tratamiento a seguir, la médico de Atención Primaria indica que es el mismo para cualquiera de estos virus: paracetamol, antiinflamatorios y antitusivos o mucolíticos en caso de tener tos seca o secreciones nasales. 

La pandemia: la causa del auge de otros virus distintos a la COVID

El presidente de la Asociación Española de Vacunología, Amós García, achaca en parte la situación actual de presencia de gripe, COVID y virus sincitial a los dos últimos años de pandemia. "Durante estos dos años hemos tenido COVID-19, pero no hemos tenido prácticamente ningún otro virus de las mismas características, entre otras cosas por la mascarilla, que desempeña un papel importante de control frente al resto de virus respiratorios que se transmiten de manera similar", ha dicho este martes en el programa Aquí y Ahora de Aragón TV. 

Amós considera que al retirar la mascarilla el SarCov-2 ya no es "predominante", porque, además, se le ha estado "arrinconando" con las vacunas, y eso ha hecho que el resto de virus como la gripe o los respiratorios sincitiales "ocupen" de nuevo su espacio. Y añade: "Estos virus no vienen con una mayor capacidad de dañar desde el punto de vista clínico, sino que vienen como siempre, pero vienen antes de lo normal y afectan a más gente. Vienen antes porque tienen avidez de ocupar su espacio, y afectan a más gente porque durante los dos años de la pandemia mucha gente no ha estado en contacto, sobre todo los niños, con este tipo de virus, por lo que son más susceptibles de resultar infectados por ellos". 

Una confluencia de tres virus al mismo tiempo que, según el experto, hace que haya más gente enferma y una mayor necesidad de recibir atención médica que puede generar en "colapso sanitario".

El presidente de la Asociación Española de Vacunología cree que no es momento aún de retirar la mascarilla en el transporte público y los centros sanitarios, pero sostiene que habría que mejorar la cobertura vacunal de la COVID-19 "con la cuarta dosis en las personas entre 60 y 80 años, y la tercera dosis en menores de 60".