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JUSTICIA

El Instituto de Medicina Legal de Aragón oferta una de las ocho plazas para formar a forenses en España

Con la creación de esta especialidad médica, se busca un relevo generacional en la profesión, de manera que se creen sinergias entre los nuevos profesionales y los que la desempeñan actualmente

ESTER L. FERNÁNDEZ /
Aragón ya imparte la Especialidad de Medicina Legal y Forense.
icono foto Aragón ya imparte la Especialidad de Medicina Legal y Forense.

En España, hay ocho plazas para formar a futuros médicos forenses. De ellas, una la tiene el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Aragón (Imlcfa). El pasado mes de junio, tras siete años de trabajo, se creó la Especialidad de Medicina Legal y Forense y, en octubre, se definió su programa formativo.

Hasta este momento, una vez acabada la carrera, los médicos debían opositar para entrar el Cuerpo Nacional de Médicos Forenses. A partir de ahora, deberán ser especialistas antes de realizar esta prueba. La acreditación la conseguirán tras cuatro años de mir en uno de los ocho centros que lo ofrecen en España, que están en Aragón, País Vasco, Cataluña, Comunidad Valenciana, Extremadura, Andalucía, Castilla y León y Castilla La Mancha. 

Salvador Baena es jefe de estudios de la unidad docente del Imlcfa.

Salvador Baena es médico forense y jefe de estudios de la unidad docente del Imlcfa. Defiende que la creación de esta especialidad es un "hito histórico" para los forenses ya que, a su juicio, garantiza que estos profesionales se formen adecuadamente

Baena explica también que esta especialidad va a suponer que la medicina asistencial y la forense se acerquen, y añade: "Se van a crear unas sinergias absolutamente necesarias. Con la formación que van a recibir y las relaciones que establezcan en las distintas unidades por las que van a pasar los residentes, sabrán a qué especialista acudir cuando lo necesiten. Y lo mismo, en la dirección contraria". 

El forense apunta también que está "muy orgulloso" de la acogida que ha tenido esta nueva especialidad y añade que es indispensable un relevo generacional. "Entre el 40 y el 50% del personal del Imlcfa tenemos más de 60 años. Necesitamos nuevas generaciones y ahora es el momento para aprovechar el cauce formativo", concluye. A partir de ahora, cada año que pase se sumará un nuevo mir, hasta un máximo de cuatro -uno por curso-, algo que ocurrirá en 2025, cuando se alcanzará la velocidad de crucero. 

José Manuel Arredondo es el director del Imlcfa. 

Además, Baena destaca la buena salud de la que goza el instituto, lo que le ha permitido "con mucho y duro trabajo detrás" ser uno de los ocho centros en España que han conseguido el certificado para impartir esta formación.  

El primer residente del Imlcfa

David Blázquez nació en Puertollano (Ciudad Real) y tiene 32 años. Es el primer residente que se formará en el instituto aragonés. Es ya especialista en Medicina de Familia y su anterior mir lo acabó antes de tiempo, por las necesidades que generó la pandemia por el covid-19. Desde los 12 años quería ser médico forense y ahora no le ha importado, pese a tener un contrato fijo en su localidad, dejarlo todo para venir hasta Aragón a perseguir su sueño. 

Explica que antes de elegir destino visitó los centros disponibles y el de Zaragoza le atrapó nada más entrar. El culpable fue su ahora mentor, Salvador Baena. Pero no fue solo eso. "Cuando llegué, pregunté por el contenido de unas cajas que tenían en la sala de autopsias. Me dijeron: 'Aquí tienes a Agustina de Aragón y a las heroínas de Los Sitios'. Supe entonces que este era mi sitio", explica emocionado. 

Estos primeros meses están siendo "muy intensos", cuenta Blázquez. Asegura también que "desde el minuto cero se los están facilitando todo", tanto Baena como el director del Imlcfa -José Manuel Arredondo-. Defiende que es el mejor momento para formarse en esta especialidad: "Los nuevos llegamos con todas las ganas y, antes de que se jubilen los profesionales actuales, podemos aprender con ellos y de toda su experiencia".

El objetivo de esta formación es trabajar para poner la Medicina al servicio de la Justicia. 

Por último, Blázquez afirma que "la realidad supera a la ficción" y que esta formación permite tener "una amplísima visión de la Medicina para luego poder llevarla a la Justicia".

¿Cómo se forma a un médico forense?

Pero, ¿cómo se forma a un médico forense? Al igual que cualquier otra especialidad mir, es un periodo de formación de cuatro años. Su objetivo, según el propio plan, es el estudio de las causas y circunstancias de la muerte y la valoración pericial de las lesiones físicas o psíquicas. También otras áreas como la toxicología, psiquiatría, genética o antropología forense y el asesoramiento en cuestiones legales y bioéticas. 

El itinerario contempla su paso por Psiquiatría, Traumatología, Rehabilitación, Riesgos Laborales, Anatomía Patológica, Obstetricia y Ginecología, Pediatría o Medicina Interna, entre otros. En lo referente a la práctica, al menos, deberá abordar 150 autopsias, 75 actuaciones de levantamiento de cadáveres, 200 analíticas de laboratorio o 75 actuaciones de asistencia a juicios. Deberá acreditar haber participado en un mínimo de 642 casos y elaborado 100 informes periciales.

Tres de los cuatro años que dura el mir se cursarán en el instituto aragonés. 

Baena explica que se trata de hacer un "traje a medida" para que los médicos se formen de la mejor manera posible para lo que después será su día a día. En este primer año, rotan por distintos centros hospitalarios mientras que los otros tres siguientes serán ya en el Imlcfa. 

Blázquez, de momento, ha pasado por el Servicio de Urgencias del Hospital Provincial, donde se atiende a mujeres víctimas de violencia de género y a personas detenidas por distintas razones; también por su unidad de Radiología y de Patología. Además, ha estado en Traumatología y Neurocirugía de la MAZ, donde ha visto accidentes laborales y de tráfico, que después deberá valorar. También, ha estado en las unidades de evaluación de bajas laborales, incapacidades, etc. 

Además, en el caso de Blázquez, se le ha convalidado el periodo en el que debía formarse en Medicina de Familia, porque ya es especialista en ese campo y así puede invertir ese tiempo en profundizar en otro. También ha iniciado ya, con el respaldo del instituto, una investigación sobre el uso de la ecografía en la Medicina Forense, de la que por el momento, no puede desvelar detalle.