El frío y el viento marcan la jornada en las tres provincias aragonesas

La masa de aire polar que afecta a la península Ibérica desde el domingo por la noche va a tardar en retirarse. Las temperaturas han sido heladoras en las tres provincias aragonesas, aunque los datos más bajos los ha registrado la de Teruel. Además, el viento ha hecho que la sensación térmica fuera aún más fría.

En Albarracín, los termómetros no han superado los 0 grados prácticamente en todo el día. Los mercurios han marcado -13,6 ºC de mínima en Bello, -11,8 ºC en Calamocha, -11,6 ºC en Santa Eulalia y en Fonfría, por ejemplo, las temperaturas no han alcanzado el positivo durante la jornada. 

En Frías de Albarracín, el viento ha hecho que los -7 ºC se percibieran como -14 ºC. Royuela ha registrado su día más frío de lo que va de invierno. Lo dicen sus vecinos y el termómetro del pueblo, que ha marcado una mínima de 13,2 ºC grados negativos. Mañana continúa el aviso naranja por temperaturas inferiores a -10 ºC en gran parte de la provincia de Teruel.            

La misma estampa gélida es la que se ha vivido en Canfranc, en Huesca. En esta localidad los termómetros han superado esta madrugada los siete grados bajo cero. Una bajada de temperaturas que ha dejado calles y montañas cubiertas de nieve. Esta noche la previsión es fría, con mínimas de hasta -10 ºC.

Durante la jornada, en la ciudad de Huesca ha resultado bastante molesto el viento, aunque en el Pirineo las rachas máximas han sido más suaves que las de este lunes y las temperaturas registradas han estado ligeramente por encima. En Barbastro ha destacado el contraste, con casi 20 grados de diferencia en la misma jornada. El municipio ha pasado a lo largo de este martes de los -5,4 ºC a los 13,5 ºC.

Al igual que en Teruel y Zaragoza, en la provincia de Huesca también hay avisos amarillos por temperaturas mínimas para la madrugada y primera hora de la mañana de este miércoles.

En Zaragoza, lo más difícil de soportar ha sido el viento, que ha complicado la movilidad en la ciudad debido a las fuertes ráfagas que han hecho que Aemet mantenga el aviso amarillo en toda la ribera del Ebro. Árboles en movimiento, patinetes en el suelo, mucha ropa de abrigo... Imágenes que van a acompañar a los zaragozanos al menos hasta este miércoles, cuando se prevé que el cierzo baje su intensidad y empiecen a subir las temperaturas.