Más contenedores marrones y sensores que detectan temperatura y volumen

Los zaragozanos van a tener que cambiar su manera de reciclar. Es una de las consecuencias del nuevo contrato de limpieza que ha licitado este viernes el Gobierno de Zaragoza. Entre las principales novedades se encuentra que el contenedor marrón -para basura orgánica- se extenderá a todos los barrios de la ciudad. Los cubos también contarán con sensores que indicarán al Ayuntamiento su volumen, su temperatura o si están volcados, con el objetivo de "gestionar mejor el servicio".

La portavoz del Gobierno de la ciudad, María Navarro, ha destacado otros cambios como el refuerzo de un 48% más de operarios los fines de semana o la realización de dos planes de limpieza intensivos al año en cada distrito vecinal. Además, el nuevo contrato ha de permitir una comunicación más directa con los ciudadanos, quienes podrán enviar una foto con su móvil al servicio de limpieza, a través de una aplicación móvil, para avisar de incidencias como un incremento de la suciedad o el cúmulo de basura en los alrededor del cubo. 

En cifras, el nuevo contrato de limpieza y recogida de residuos supondrá una inversión de 743,5 millones en 10 años. Con él, se se renovará el 76% de las más de 9.200 papeleras que hay en la ciudad y el número de camiones recolectores pasará de 56 a 64; los vehículos lavacontenedores, de 6 a 8; las barredoras en calzada, de 11 a 17 y las de acera, de 29 a 37. También está previsto instalar 15 nuevas papeleras compactadoras inteligentes que funcionarán con energía solar.

Las empresas interesadas tendrán 50 días hábiles para presentar sus ofertas, a partir de su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP). En este sentido, Navarro ha mencionado que este contrato es "prioritario" y que desde el Gobierno municipal tratarán de hacerlo "en tiempo récord".