Las fiestas de San Fermín también se celebran a 200 kilómetros de Pamplona

Ataviados con pañuelicos rojos, luciendo orgullosos la bandera de Navarra, disfrutando de un almuerzo digno de ser servido en Pamplona y al son de las jotas de la comunidad. Así celebran los miembros y simpatizantes de la Casa de Navarra en Zaragoza el multitudinario chupinazo y lanzamiento del cohete que anuncia los sanfermines a 200 kilómetros de distancia de la plaza Consistorial de Iruña. Según los últimos datos del Instituto Aragonés de Estadística, 877 navarros se mudaron a Aragón en 2021.

"Como desde hace algunos años, no tenemos sede, nos reunimos todos los 6 de julio a partir de las 11:45 horas en el bar El Pájaro Azul -en la calle Doctor Cerrada, 8- y, allí, invitamos a todos los que se acercan a vivir esta fecha tan importante con nosotros a una consumición y a un pincho", explica Ana Notivoli, presidenta de la Casa de Navarra en Zaragoza. El evento está abierto a todos los que quieran participar. ¿Los requisitos? Llevar un pañuelico rojo y tener ganas de disfrutar de esta fiesta tan popular incluso desde la capital aragonesa. "Cualquiera que quiera venir puede hacerlo", invita Notivoli.

Tras el chupinazo, la celebración se desplaza hasta el restaurante de la Casa de Andalucía donde cambian su menú habitual por un auténtico almuerzo 'sanferminero', compuesto por huevos con chistorra, ensaladas (en las que no pueden faltar los cogollos y espárragos de Tudela), tarta navarra -"que normalmente traen desde Pamplona"- y, para culminar, un chupito de pacharán.

"Para después, hemos contratado a un jotero, al artista Diego Urmeneta, que es el segundo año que nos acompaña y siempre se mete al público en el bolsillo", apunta la presidenta de la Casa Navarra, que actualmente cuenta con medio centenar de socios en la capital aragonesa.

A esta jornada lúdica le seguirá la misa programada para este jueves, día 7 de julio, a las 20:00 en la basílica del Pilar. "Es un evento muy especial porque hablamos de San Fermín y, normalmente, está oficiada por religiosos navarros o gente que conoce muy bien nuestra comunidad", indica Notivoli. 

En agosto, los encierros de 'San Cojón'

Inspirados en los populares encierros pamplonicas, en agosto, durante los festejos de sus fiestas mayores, los vecinos de Sos del Rey Católico recorren las calles de la localidad zaragozana emulando las multitudinarias celebraciones navarras. Según cuentan las crónicas de la villa, redactadas por Manuel Valle, esta réplica, en forma de parodia y bajo el nombre de 'San Cojón', nació en la década de los 80, cuando un grupo de jóvenes decidió rellenar el hueco en blanco a altas horas de la madrugada de la programación festiva con un encierro muy singular, en el que un mozo, simulando ser un toro, empujaba un contenedor mientras todos los demás corrían delante.

Desde entonces, muchas han sido las innovaciones que han ido introduciendo en este encierro, que ha incorporado elementos como el cohete anunciador, y para el que ya hay fijado un recorrido -desde el portal de la Reina hasta la plaza del Ayuntamiento- y una hora, las 8:00. Además, en la actualidad también se coloca la imagen del 'santo', que se corresponde con una escultura de inspiración asiática, al que se le pide con tres cánticos su protección durante el encierro.

"En los 90, fue sobre todo la familia Pascualena la que se encargó de hacer los toros de cartón, con espuma de obra, astas reales y una rueda de bicicleta", explica Nacho Valle, vecino de Sos del Rey Católico. Durante aquella época, señala: "Se pusieron hasta andamios de cartón y madera para quienes fingían ser los operadores de cámara de Televisión Española y hasta había vecinos que se disfrazaban de enfermeros de Cruz Roja. Después, los encierros cesaron durante algunos años, hasta que los retomó nuestra cuadrilla. Hicimos carteles y toros nuevos". "Ahora, somos varias las peñas que lo organizamos: El Estacazo, Los ciclones y El Huracán", cuenta Valle.