Casi la mitad de los 1.300 refugiados ucranianos que acoge Aragón ya han recibido protección temporal

Casi desde el mismo comienzo de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, de la que se cumple un mes, las autoridades aragonesas, las oenegés y la sociedad civil se han coordinado para recibir a refugiados ucranianos. De momento, la Comunidad aragonesa ha recibido a 1.300 personas que han solicitado protección temporal o están pendientes de hacerlo y ya se ha les concedido a 595, de los que 244 son menores.

Para ello piden cita previa en oficinas especiales de extranjería de la Policía habilitadas para ello desde la segunda quincena de marzo. Una vez que presentan su solicitud, se les entrega una documentación provisional en 24 horas y un mes después está previsto que les llegue la tarjeta con su permiso de residencia y trabajo. Además de en Zaragoza, también hay una oficina en Huesca y otra en Teruel y la semana del 28 de marzo se abrirá una nueva en Jaca para atender a los 80 desplazados que han llegado hasta esa zona.

Desde el Gobierno aragonés y el Gobierno central, que coordinan la protección temporal de los refugiados, aseguran que el proceso está siendo ágil: "Agradecemos el buen trabajo que los especialistas tanto en educación como en menores nos han ofrecido y que están ayudándonos a que estas tramitaciones sean garantistas en cuanto a la protección del menor", ha asegurado la delegada del Gobierno en Aragón, Rosa Serrano.

83 niños ucranianos ya están escolarizados y se están acelerando los trámites para que, quienes todavía no la han recibido, tengan asistencia sanitaria. Además, desde el departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales del ejecutivo aragonés se va a crear un centro de emergencia "de tamaño mediano" para los refugiados recién llegados. "Ocho menores no acompañados han llegado a la comunidad, en concreto a Huesca, y están en guardia provisional en la provincia", ha explicado la consejera del ramo, María Victoria Broto.