Autobuses movidos con biometano unirán Zaragoza y Cuarte de Huerva

Autobuses de gas, movidos con biometano, darán servicio desde este 1 de septiembre a la línea de transporte 410, que comunica Zaragoza y Cuarte de Huerva. El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, y presidente del Consorcio de Transportes del Área de Zaragoza (CTAZ), José Luis Soro, ha presentado este martes los nuevos autocares, que se surtirán del gas procedente de plantas depuradoras, purines de granjas de cerdos o de plantas de gestión de residuos.

"Se trata de la primera línea del área metropolitana que usará este tipo de combustible, con certificado de garantía de origen, en todos los vehículos que prestan el servicio", ha señalado Soro, quien ha añadido que entre las virtudes de este autobús figura una autonomía que, a día de hoy, queda muy lejos de la que permiten los autobuses eléctricos disponibles, en torno a 250 km en condiciones urbanas.

Asimismo, el consejero ha apuntado la importancia de prestar un servicio de transporte de calidad, con la responsabilidad de asumir los retos de la emergencia climática. En este sentido, ha recordado que “la movilidad es el primer sector emisor de gases de efecto invernadero responsables del cambio climático", con una contribución del 27,7% del total.

Las primeras pruebas con estos autobuses se realizaron en diciembre de 2020, en la línea que une Villamayor de Gállego con Zaragoza. Finalmente, se aplicarán sobre la 140, que une Zaragoza–Cuarte, por ser la más usada de las interurbanas metropolitanas, con 480.000 viajeros al año. Un día laborable esta línea recorre una media de casi 400 kilómetros por cada autobús.

Para el consejero, la apuesta por el consumo de biocombustible en líneas de transporte público metropolitanas o autonómicas “plantea una logística asumible y competitiva en costes, con todas las ventajas desde el punto de vista ambiental”, así como sirve de acicate para el desarrollo en Aragón de más plantas de producción de biometano de origen renovable, lo que "permite pensar en la implantación de un nuevo modelo de desarrollo económico en el medio rural, creación de empleo y aprovechamiento de los residuos”.