Así fue la mayor operación contra las carreras ilegales que se ha desarrollado en Aragón

Es la mayor actuación contra las carreras ilegales de coches y motos que se ha desarrollado en Aragón. La operación 'Quedadas PTR', como fue bautizada, se llevó a cabo a lo largo de tres meses de forma conjunta por la Policía Local y la Guardia Civil. Culminó la noche del pasado 1 de octubre, con una intervención en el Parque Tecnológico de Reciclado 'López Soriano', en el barrio de La Cartuja, en la que se formularon 61 denuncias y se inmovilizó uno de los vehículos participantes. Fue el final de un operativo que incluyó cámaras de vigilancia, agentes infiltrados y noches de guardia.

La investigación comienza en 2019, con la detección de las primeras carreras ilegales en el parking del canal. En ese momento era un grupo pequeño que iba cambiando de localización para cometer sus actos ilegales. El polígono El Portazgo, la zona de Torre Outlet o el polígono San Miguel eran otros de los puntos en los que competían y hacían derrapes en noches a las que cada vez asistía más público. Según las imágenes de las cámaras de vigilancia y los testimonios de los agentes infiltrados, en alguna de estas quedadas llegaron a juntarse más de 1.500 espectadores, algunos de ellos incluso familias.

La operación 'Quedadas PTR' se pone en marcha en verano de 2022. Las imágenes captadas por los dispositivos de grabación permitieron identificar a todos los participantes. A lo largo de tres meses, además, agentes de la policía y la Guardia Civil rastrearon las redes sociales que utilizaban los delincuentes para acordar la hora y el lugar de sus encuentros. Con toda esa información prepararon la intervención con la que culminaría el operativo la noche del 1 de octubre. Más de 70 agentes bloquearon los accesos al PTR López Soriano e irrumpieron sorprendiendo a quienes habían acudido para participar con sus vehículos o ser espectadores.

Con ese golpe, se daba por desarticulado este grupo que llevaba más de tres años organizando carreras y exhibiciones de derrapes en el entorno de Zaragoza, poniendo en riesgo la seguridad vial. En total, se formularon 170 denuncias por delitos e infracciones relacionados con la conducción temeraria y se cerró un taller en el que se llevaban a cabo las modificaciones ilegales de los vehículos.