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SAN LORENZO

Las peñas de Huesca, en su segundo año sin fiestas: "Lo vivimos con mucha pena"

La crisis sanitaria ha provocado la pérdida del 70% de los socios desde que comenzó la pandemia

ARAGÓN NOTICIAS /
La calle Porches de Galicia de Huesca, casi vacía.
icono foto La calle Porches de Galicia de Huesca, casi vacía.

Comienza la semana grande de Huesca pero, por segundo año consecutivo, no habrá fiestas de San Lorenzo que celebrar. La COVID-19 ha vuelto a provocar la suspensión de las fiestas patronales y, por segunda vez, la gente no abarrotará las calles de la capital altoaragonesa durante estas fechas. Las peñas recreativas, unas de las grandes protagonistas de estas celebraciones, se vuelven a ver afectadas por la situación sanitaria y viven estas jornadas de una forma muy diferente a cómo lo hacían hace ya dos años. "A nivel de ánimos lo vivimos con mucha pena, el año pasado no nos podíamos creer que no hubiera fiestas y este tampoco hay actos programados en la ciudad. Yo me voy de Huesca por no estar así", cuenta Ana Lite, la presidenta de la peña 10 D'agosto. 

Las pérdidas económicas son una de las consecuencias del parón de dos años de actividad en las peñas, que se han situado en una situación monetaria que califican de "desastrosa". La crisis sanitaria desatada por el coronavirus ha provocado un bajón en el número de socios afiliados a las distintas agrupaciones oscenses. Desde la Alegría Laurentina establecen una pérdida del 70% de los socios desde el comienzo de la pandemia, una posición que intentan revertir con la campaña de socios de este año. "Apelamos al corazón de la gente para que nos muestren su apoyo", indica su presidente, Javier Ibarz.

Las peñas se quedan sin fuente de ingresos por segundo año, pero con unos gastos mínimos que necesitan cubrir. Es el caso del salón Jai Alai, perteneciente a la Alegría Laurentina, donde se han celebrado cientos de conciertos durante las fiestas de San Lorenzo de años anteriores. "Tenemos que mantener el local, pagar un alquiler, electricidad, seguros. Todo lo que hemos obtenido lo hemos destinado a su mantenimiento", explica Ibarz. La campaña de socios se realiza de forma simbólica este año y la mayoría de las casetas se han ubicado en los Porches de Galicia, en pleno centro urbano de Huesca, mientras que otras la llevarán a cabo desde sus sedes. El precio establecido por todas es de diez euros y ofrecen varias modalidades de socios y productos laurentinos. 

Por su parte, desde algunas de las peñas reclaman que durante todo este tiempo no han recibido apoyo por parte del Consistorio oscense. "Este año estamos más enfadados. A nivel económico tenemos cero ingresos, el Ayuntamiento no nos ha ayudado nada", afirma la presidenta de la Peña 10 D'agosto, Ana Lite. Esta situación se debe a que las peñas no han recibido subvenciones del Consistorio, puesto que no pueden realizar actividades a causa de la pandemia. "Hemos intentado buscar otras soluciones, pero al final se entendían como subvenciones indirectas y no podíamos asumirlas", informa el concejal de Fiestas, Ramón Lasaosa. 

A las peñas recreativas solo les queda esperar a que el año que viene vuelva un San Lorenzo "con toda la normalidad posible". "Estamos deseando las fiestas del 2022, pero tenemos miedo porque no sabemos cómo va a evolucionar toda la situación. Sigue habiendo incertidumbre porque ya esperábamos poder celebrar el año pasado y no ha sido posible", concluye el presidente de la peña Los 30, Tomás Hernández.