El Pirineo arranca el mes de julio con más turismo extranjero y una ocupación de entre el 50 y el 70%

El Pirineo aragonés recupera este verano el turismo extranjero. Tras dos años en pandemia, este es el primer mes de julio sin restricciones sanitarias, lo que anima a los turistas internacionales a pasar sus vacaciones en la montaña. La ocupación media en el Pirineo para este mes de julio ronda el 50%, aunque desde la Asociación de Hostelería y Turismo de Huesca esperan muchas reservas de última hora. 

"Ya hemos conseguido tener un destino importante de cara a Europa y lo que estamos haciendo es consolidar. Ahora que se ha acabado la pandemia, la verdad es que están acudiendo", confirma el presidente de la Asociación Turística Valle de Benasque, José María Ciria.

La afluencia de los primeros turistas de la temporada se nota en restaurantes, campings y hoteles de la zona. "Es la segunda vez que venimos y repetiremos porque nos encanta. Benasque es precioso", comenta un matrimonio al finalizar una ruta senderista cerca de la localidad. 

"De aquí a la trail Aneto-Posets, que sería para el día 22, tenemos buena ocupación y a partir de ese día es cuando la ocupación llegará al 100% hasta finales de agosto", augura Mikel Campos, subdirector de Hoteles Sommos Aneto, en el valle de Benasque, donde la ocupación ronda en julio el 70%.

La costa mediterránea, la elección de muchos turolenses

La costa y las playas de Castellón, como la de Sagunto, son los lugares elegidos por muchos turolenses para disfrutar del comienzo del verano. Su ubicación, a 100 kilómetros por autovía de Teruel, hacen de este un destino cómodo. 

El alquiler vacacional es la opción más elegida, pero también hay segundas residencias de aragoneses e incluso jubilados que optan por pasar todo el verano en las playas de la costa mediterránea.

El 15% de las consultas en las oficinas de turismo de la zona de Castellón son de turolenses.