Los hoteles de Aragón confían en una nueva etapa, tras perder el 73% de pernoctaciones

"Un año normal tendríamos hechas ya el 75% de las reservas para el verano, este año apenas llegamos al 10%". Son las cifras de pernoctaciones con las que trabajan en los hoteles que el Grupo Hotelero Gargallo tiene en las provincias de Huesca y Teruel. Son también fiel reflejo de la situación que atraviesa el sector hotelero en Aragón, donde las pernoctaciones han bajado un 73,7% en el último año (desde marzo de 2020 a marzo de 2021).

La Comunidad cuenta con 45.344 plazas, repartidas en 939 alojamientos hoteleros, según el último Boletín de Coyuntura Turística del Gobierno de Aragón. La ocupación bajó un 26,6% el pasado marzo, respecto al mismo mes de 2020. Ahora, el fin del estado de alarma es un revulsivo para estos establecimientos. "Desde el domingo hemos recibido una auténtica avalancha de reservas", explica el director regional del Grupo Gargallo, Adolfo Ibáñez, aunque reconoce que no son suficientes para reabrir todos sus alojamientos en la Comunidad. De los ocho establecimientos que tiene el conglomerado en Aragón, solo cuatro están abiertos actualmente.  Una situación que ha derivado en que 150 de sus trabajadores se encuentran en ERTE, y solo 60 en activo: "Con estos aforos del 30%, y poco movimiento, no podemos hacer más", lamenta Ibáñez. 

La provincia de Huesca es la que más plazas hoteleras oferta en la Comunidad, 18.774, y la que más ha visto bajar las pernoctaciones en el último año, un 86,6%. Le sigue Zaragoza con 17.685, aunque ha acusado menos el descenso de las reservas: 59,2%. Por su parte, la provincia de Teruel oferta 8.885 plazas, sin embargo, en proporción es la que más acusa el descenso en las pernoctaciones, un 77,8% menos en el último año.

El 40% de los empresarios confía en salir adelante

El mercado "ha cambiado mucho en el último año", mantiene Adolfo, algo que se está traduciendo en un auge de las reservas de última hora: "Hay gente que hace la reserva a través de móvil en la misma puerta del hotel", cuenta. Con todo, el director regional del Grupo Hotelero Gargallo se muestra "esperanzado" y "agradecido", porque en los meses de confinamiento, cuatro de sus hoteles siguieron trabajando como centros medicalizados y alojamiento para personal sanitario. "No tuvimos excesivo trabajo, pero al menos no cerramos", subraya. 

En la provincia de Zaragoza, siete de cada diez hoteles están abiertos. El 40% de los empresarios confía en salir adelante, aunque uno de cada dos establecimientos cerrados desconoce cuándo reabrirá sus puertas, según estima la Asociación Profesional de Empresarios de Hoteles y Restaurantes de Zaragoza (Horeca). Respecto a la ocupación actual de los hoteles de la provincia, entre enero y abril apenas alcanzaron el 21%.

"Un año normal estaríamos al 90%, pero este mes de mayo rozaremos como mucho el 50%", apunta José Antonio Palau, director del Hotel Ilunion Romareda. Un complejo que se distinguió durante los meses más duros de la pandemia por alojar a los sanitarios que rehusaban ir a sus casas por no poner en peligro a los familiares. Admite Palau, además, que su situación es "mejor que la media de la provincia", por su ubicación cercana al Hospital Universitario Miguel Servet, al Auditorio y al estadio de la Romareda, lo que se traduce en reservas de grupos musicales, participantes en eventos y pacientes del hospital. 

"Hemos notado un ligero incremento de reservas para el próximo fin de semana", señala el director del hotel, aunque aventura que de mayo a agosto "trabajaremos a pérdidas". Sin embargo, se muestra "contento", dice, porque "estamos trabajando y desde el 1 de diciembre no tengo a nadie en ERTE". Palau es "optimista" y espera que los congresos, ferias y eventos aplazados por la pandemia en 2020, se retomen a partir del mes de septiembre, lo que supondría "un alivio".