Publicidad
DESPOBLACIÓN

Los trabajadores del sector tecnológico, la apuesta de futuro para repoblar el entorno rural

El teletrabajo creció en Aragón casi un 13% más en el último año. En la comarca de la Jacetania han creado la asociación Movimiento Tecnológico Rural para fomentar este sector en los pueblos

MADALINA PANTI /
Pedro García y Marcos Rupérez realizaron este verano la ruta B-Rutal por varios pueblos de la provincia de Huesca. / A.M.T.R.
icono foto Pedro García y Marcos Rupérez realizaron este verano la ruta B-Rutal por varios pueblos de la provincia de Huesca. / A.M.T.R.

El mundo rural se ha convertido en un atractivo para muchas personas que han visto sus ventajas en su estilo de vida. Con la pandemia, algunos decidieron optar por un entorno más natural para desarrollar el teletrabajo. De hecho, Aragón es una de las comunidades autónomas donde más ha aumentado el teletrabajo en el último año. El informe de Adecco 2022 recoge que creció hasta un 12,8%, porcentaje que supone el tercer mayor incremento autonómico con 8.100 teletrabajadores más.

Pedro García y Marcos Rupérez, son dos profesionales que se dedican al sector tecnológico y que decidieron realizar el proyecto Bici Ruta Rural "B-Rutal", para analizar la realidad existente en el entorno rural en diferentes pueblos de la provincia de Huesca. "Vivíamos en pisos pero queríamos hacer un cambio. Fue una ruta de investigación en la que recorrimos las localidades y entrevistamos a los alcaldes y emprendedores que ya había porque queríamos ver de qué manera podíamos trasladar nuestra actividad del mundo rural", destaca García. 

En la ruta también han identificado algunas barreras que dificultan trasladar la actividad en el pueblo: "Uno de los mayores problemas es la falta de vivienda residencial porque el sector turístico lo ha ocupado todo, solo puedes ir o el fin de semana o comprarla. Internet, depende de para qué actividades, también es complicado y, sobre todo, falta una comunidad de gente que se dedique al sector tecnológico". A esta última cuestión, García, Rupérez y José Luis Pina, decidieron ponerle solución creando la asociación Movimiento Tecnológico Rural destinada a fomentar el desarrollo del sector tecnológico en el entorno rural. Actualmente el 95% de su actividad actual se centra en la provincia de Huesca. 

Nueva tecnología en pueblos y empresas

Se financian ofreciendo servicios de formación, consultoría o vídeos a empresas y con ello, poder desarrollar proyectos para los pueblos de manera gratuita. García sostiene que han recibido mucha aceptación pero que su visión no es compartida por todos: "Trabajamos con ayuntamientos motivados con nuestra visión. Hay gente a la que le cuesta aunque cada vez menos, porque ya se ve normal lo de teletrabajar". 

En este momento están desarrollando para ellos, una aplicación cuyo objetivo es poner en contacto a personas que viven en la ciudad con localidades que se han adherido al proyecto. Con ella, pretenden incentivar que la gente conozca y se acerque a estas zonas despobladas. "Te aparece una lista en la que te pone si tiene colegio, polideportivo, centro social... Los puede ver a través de la app y, si le interesa el pueblo, hemos nombrado un embajador rural que se ofrece de manera voluntaria a enseñárselo", comenta García. El joven adelanta que puede estar disponible en el año próximo. 

También en el 2023 estará disponible otra aplicación, que en esta ocasión la han creado para autofinanciarse. Se llama MENUTO y está dirigida a casas rurales, hoteles o apartamentos turísticos. "Los menutos en la mitología aragonesa son unos duendes que habitaban en las casa del Pirineo y cuando venía alguien se les acogía. Cuando llega un inquilino a estos establecimientos, la app le ofrece todos los servicios que hay en el pueblo, actividades, eventos y fauna y flora de la zona. Además hay un video del dueño donde explica cuestiones cómo se enciende la calefacción, si hay lavadora o comedor, etc.", explica el joven. 

Prueba de MENUTO. / P.G.

Una mirada al futuro

Su iniciativa más ambiciosa es conseguir crear un Centro Tecnológico Rural en un antiguo edificio en la localidad de Berdún, en la Jacetania, que llevaba 30 años abandonado. La idea es que disponga de un espacio de coworking con habitaciones, comedor y baño, que permita que los teletrabajadores acudan de manera puntual y desarrollen su trabajo desde allí. "Ya hay empresas que ofrecen a sus empleados una semana en otro espacio para poder lograr más creatividad o el trabajo en equipo. Además, hay muchos empleados que demandan vivir en zonas más naturales porque priorizan su modo de vivir al trabajo", afirma García. También añade que habría un retorno para el pueblo como clases de inglés, de música o sobre cómo mejorar la contabilidad del ganado. "El objetivo es que se interrelacionen. Esa conexión emocional de la experiencia podría hacer que los trabajadores se planteen vivir a largo plazo", afirma. 

Tienen gran parte del proyecto elaborado y un estudio para en que se visualiza el edificio rehabilitado. Ahora están a la espera de financiación. "Ojalá salga, conseguimos que diez empresas firmaran una carta de apoyo para llevar a sus teletrabajadores allí. La ocupación es de un 30% antes de empezar", indica. Si lograran su objetivo, sería el primer centro de este tipo en Aragón.