Falta de semiconductores: "No vemos solución hasta 2023"

El presidente del Clúster de la Automoción, Benito Tesier, ha estimado que el problema de la falta de chips semiconductores, que está repercutiendo a nivel mundial a diferentes industrias incluidas la del automóvil, "no tendrá solución antes de 2023" aludiendo a que es un problema "geopolítico" relacionado con el aumento de demanda y la falta de producción. 

En una entrevista, este jueves, en el programa Buenos Días Aragón, en la que también ha participado la profesora de la Universidad de Zaragoza y CIRCE, Alicia Valero, Tesier ha querido recordar los motivos por los que actualmente hay carencia de semiconductores. "El efecto confinamiento provocado por la COVID-19 y el aumento de la tecnología doméstica disparó su consumo", ha explicado el presidente del Clúster, para agregar que actualmente hay tres "monstruos" que controlan la producción: Samsung, Intel y la empresa taiwanesa TSMC, que fabrica el 65% de los semiconductores en el mundo.

Para paliar el problema, "hay que crear capacidad productiva y se abre otra variable: en el año 2000 generar una fábrica costaba 1 billón de dólares y en 2022, 15 y 20 billones", ha expuesto. Por este motivo, Biden ha considerado recientemente un problema de seguridad nacional destinando 50 billones de dólares para proteger el autoconsumo, lo que hace que se convierta en un problema geopolítico. Por desgracia desde el sector no vemos solución antes del 2023".

Reaprovechamiento de materiales

A juicio de Alicia Valero, esto "no es problema puntual sino estructural" ligado al consumo exponencial de este tipo de materiales. "No hay planeta suficiente para satisfacer la demanda" ha esgrimido la profesora, para quien la solución pasa por "recuperar la materia prima que Europa no tiene y fomentar la industria de recuperación de artefactos".  "Las fábricas producen dos coches al minuto pero: ¿cuántos coches desensamblan?, se ha preguntado Valero, para agregar que son necesarias muchas "desfábricas" de esa economía ya que se están perdiendo "muchos elementos valiosos". 

En este sentido, ha puesto el ejemplo de que un teléfono actual tiene 40 elementos distintos o que "un coche es una mina con ruedas que tiene la tabla periódica completa", a diferencia de hace unos años, cuando eran "acero y poco más". Además, ha asegurado que materias primas como el cobalto o níquel de las baterías son escasos y "están controlados por pocos países", lo que va a generar que las paradas en el sector sean "el pan de cada día"

Tesier ha coincidido en afirmar que es necesaria una política de reaprovechamiento de materiales. En el caso de la automoción, ha considerado que "hay que sensibilizar más sobre el achatarramiento de vehículos; crear una hoja de ruta; saber diferenciar las materias reutilizables de las que no lo son, y ser más exigente en la normativa. "A lo mejor hemos querido avanzar demasiado y ahora nos hemos dado cuenta que no hemos analizado si estábamos preparados", ha apostillado.